EL CONOCIMIENTO DE LA VERDAD
Y EL CRECIMIENTO EN VIDA
PARA LAS REUNIONES EN CASA
En los mensajes que vienen, mi carga es compartir con ustedes cómo tener las reuniones en casa, cómo hacerlas ricas, fuertes, frescas, vivas, tan atractivas, aun tan atrayentes y capaces de sostener a la gente.
Muchos de nosotros estamos muy preocupados por las reuniones en casa porque no es tan fácil que las reuniones en casa sean ricas, fuertes, frescas, vivas, atractivas y capaces de sostener a la gente. En las reuniones grandes sólo necesitamos dos o tres personas entrenadas y seleccionadas. De tener a un Billy Graham se puede retener a miles de personas. Puede que argumenten que ustedes no tienen a tal persona en su reunión en casa. Pero alabado sea el Señor, tenemos miles de don nadies. Todos éstos tienen que ser hechos útiles.
¿Cómo tienen una reunión en su casa que sea rica, fuerte, fresca, viva, atractiva y capaz de sostener? Hechos 5:42 dice: “Y cada día, en el templo y de casa en casa, no cesaban de enseñar y de llevar las buenas nuevas de Jesús como el Cristo”. La palabra enseñanza significa que sabían la verdad. Y el llevar las buenas nuevas de Jesús como el Cristo significa que predicaban. Eran capaces de enseñar, y eran capaces de predicar. En el pasado hemos tenido conferencias y entrenamientos anuales, tanto en verano como en invierno. Hemos terminado el estudio completo de todo el Nuevo Testamento, y los mensajes se han imprimido. Muchos de ustedes tienen la colección completa de los Estudios-vida del Nuevo Testamento en los estantes en sus casas. Sin embargo, ¿qué cantidad de la verdad que se transmite por medio de esas páginas de los Estudios-vida realmente ha entrado en ustedes? Y, ¿cuántas verdades pueden ustedes enseñar a otros? Estoy un poco preocupado de que no sean muchas.
También hemos dado mucho énfasis en el crecimiento en vida. Necesitamos saber la verdad y necesitamos crecer en vida. Pero otra vez, ¿cuánto crecimiento han tenido ustedes en los años pasados? Según mi observación, no es bastante. En cierto sentido, es una desilusión. Pero en otro sentido, es un aliento porque todavía están aquí. Están todavía buscando y tienen hambre y sed.
Me doy cuenta de que hemos publicado las verdades, pero hemos ayudado a los santos de una manera muy suelta. En cierto sentido, yo lamento, pero tengo que decirles que yo no tenía alternativa en el pasado, aun en los días que vienen todavía no tengo alternativa. Tengo que dedicar el tiempo para publicar la Palabra de Dios. El hermano Nee, así como los otros que nos precedieron, sabía tanto, sin embargo no queda mucho de lo que él sabía. Solamente tenemos algunos de los libros. De esto me di cuenta de que debo tomar el tiempo para publicar lo que el Señor nos ha mostrado en estos años y ponerlo en imprenta.
Yo creo que habrá un período de tiempo para que el Señor haga algo para edificar Su iglesia antes de regresar. Debido a esto anticipo una gran necesidad para los Estudios-vida en el futuro. Todavía tengo carga de publicar los Estudios-vida del Pentateuco y los profetas del Antiguo Testamento. Debo dedicar por lo menos una mitad del tiempo para lograr escribir, hablar y publicar estas cosas. Además todavía tengo la carga de cuidar de algunas regiones, por ejemplo, Taiwán. Hay la necesidad de regresar una y otra vez. También estoy esforzándome por hacer más que lo que hice en el pasado para las iglesias en los Estados Unidos. De ahora en adelante quisiera tener más tiempo con ustedes y con los que toman la delantera, exhortando a todos nosotros para que seamos precisos. Aunque tenemos Estudios-vida sobre los veintisiete libros del Nuevo Testamento, los santos tienen que meterse en ellos. Tenemos que meternos en lo que se enseña en Mateo, en lo que se enseña en Marcos, en lo que se enseña en Lucas, en lo que se enseña en Juan, en los Hechos, y así sucesivamente. Esto requiere tiempo.
El sistema educacional de la raza humana se ha practicado por miles de años. Ahora el mundo entero sigue la misma clase de sistema educacional. Tenemos el jardín de niños, la primaria, la secundaria, luego la universidad y los estudios posgraduados. Si se enseña a la gente en matemáticas de una manera suelta sin seguir este sistema educacional, cuando se envejecen, no sabrán mucho. Hay que tener una forma definida para ordenar a la gente a que cumplan el curso. Se requieren seis años para cumplir la primaria, otro seis años para cumplir la escuela preparatoria, luego otro cuatro años para cumplir la universidad. Después de que hayan cumplido esto habrán recibido un entrenamiento definido. Así se debe hacer. Entonces todos necesitamos esforzarnos. Por medio de los grupos pequeños tenemos la forma para hacerlo. Supongamos que una escuela con mil estudiantes no tiene clases formadas, sino solamente invita a personas que pronuncien buenos discursos por todo el año. Los estudiantes obtendrán algo, pero sólo de una manera muy suelta y general. Pero si yo abriera una escuela, no invitaría buenos oradores sino buenos profesores. Construiría las salas de clase, formaría clases, y instalaría a los mejores profesores. Luego ellos enseñarían las clases semestre tras semestre. No necesitaría invitar a ningún orador bueno. Tendría una fuerte escuela formada y todos los estudiantes que se graduarían de mi escuela serían muy definitivamente educados. Debemos aprender esta forma. Nuestras clases son los grupos pequeños. Tenemos que formarlos grupos pequeños.
En cierto tiempo en Dallas había dos congregaciones bautistas particulares. Una dependía de tener un buen orador para la congregación grande, mientras que la otra dependía de las clases. Después de algunos años la que estaba por las reuniones grandes, que tenían los números grandes, finalmente vino a ser un fracaso con un número pequeño. Pero la que prestaba atención a las clases y que tenía un número pequeño al principio, finalmente tenía un número acerca de diez veces mayor que la otra.
Sólo tener conferencias generales para dar ciertos mensajes no sirve muy bien. Necesitamos establecer las salas de clases con maestros determinados. Pero, ¿dónde están nuestras salas de clases? Cada casa es una sala de clases. Y cada hermano o hermana de esa casa particular debe ser el maestro. Ustedes tienen que arreglar su casa como una sala de clases. Edúquense y entrénense como maestros. Luego conjuntamente con esto, un buen maestro tiene que ser una persona madura. Aunque un niño tuviera el mejor conocimiento, no podría ser un buen maestro. Por consiguiente necesitamos crecer en vida. Todas las iglesias tienen que esforzarse para educar completamente a cada santo en las verdades espirituales, y para hacer que todos crezcan en vida. Sólo estas dos cosas podrían calificar a los santos para ser buenos para las reuniones de casa.
Tenemos que creer que en una reunión en casa de cinco o seis por lo menos dos o tres podrían y deberían ser ricos en el conocimiento de la verdad y ricos en el crecimiento de la vida. Cuando se reúnan estos dos o tres espontáneamente llegarán a ser la riqueza, la fortaleza, la novedad, la viveza, el poder atrayente y el poder sostenedor de ese grupo pequeño. Podrían ser útiles y su utilidad se podría aplicar a la situación práctica. Sin embargo, escuchar a un orador en una congregación grande, en cierto sentido, anula su utilidad. Entonces, de ahora en adelante yo les daría consejo a todas las iglesias que sólo tengan a lo máximo una congregación grande cada semana. No atesoren el hablar del hermano Lee; todos ustedes tienen que reunirse para ensayarse a hablar. No digan que no saben hablar. Sólo hablen. Cada uno de ustedes pueden ser un apóstol, un evangelista, un maestro y un pastor.
Espero que ustedes estén profundamente impresionados para repudiar el aprecio exagerado de la forma congregacional, y que estén profundamente impresionados para comprender la necesidad de los grupos pequeños. Luego, en segundo lugar, espero que obtengan el conocimiento adecuado de la verdad. Traten de estudiar el Nuevo Testamento y traten de pasar tiempo para meterse en los Estudios-vida. Me gusta ver las casas de los santos donde hay Estudios-vida en cada cuarto para que en cualquier momento, en cualquier lugar, pueden meterse en ellos. Pero temo que en las casas de ustedes todos los Estudios-vida estén acumulados en los estantes. Métanse en el conocimiento pleno de la verdad y luego oren al Señor: “Señor concédeme la misericordia y la gracia para que yo crezca en Ti. Dame gracia para crecer, Señor”. Oren mucho, buscando el crecimiento en vida. Serán avivados. Serán factores para enriquecer, fortalecer, refrescar y avivar las reuniones en casa. Luego las reuniones en casa serán atractivos y capaces de sostener cualquier miembro.
(
Reuniones en casa, Las: Manera única para tener el aumento y la edificación de la iglesia, La, capítulo 1, por Witness Lee)