I. EL LUGAR Y EL AUDITORIO
A. En el monte
Mateo 5:1 dice: “Viendo las multitudes, subió al monte; y cuando se hubo sentado, se le acercaron Sus discípulos”. El nuevo Rey llamó a Sus seguidores junto al mar, pero El subió al monte para darles la constitución del reino de los cielos. Esto indica que necesitamos subir con El para poder comprender el reino de los cielos.
Es muy significativo que la constitución del reino de los cielos fue promulgada en un monte. El mar representa el mundo corrompido por Satanás. Cuando el Señor nos cautivó, estábamos en el mundo corrompido por Satanás esforzándonos en ganarnos la vida. Pero después de que el Señor nos cautivó, nos condujo a un monte elevado, el cual representa el reino de los cielos. Esto indica que el reino de los cielos no se estableció junto al mar, sino en el monte. En la Biblia un monte a veces representa el reino. Por ejemplo, según Daniel 2:34-35, la piedra cortada sin manos despedazó la imagen y llegó a ser un gran monte que llenó toda la tierra. Este monte representa el reino milenario. Por esto, en la Biblia un monte representa el reino, especialmente el reino de los cielos.
Además, ser llevado al monte significa que si estamos dispuestos a escuchar la promulgación de la constitución del reino de los cielos, no debemos quedarnos en una llanura baja, sino subir a un monte elevado. Debemos estar en un nivel muy alto para escuchar la constitución. En la orilla del mar, el Señor simplemente dijo: “Venid en pos de Mí”. Pero cuando iba a promulgar la constitución del reino de los cielos, los llevó a la cumbre de un monte. Tal vez sea fácil seguir al Señor, pero escuchar la constitución con miras al establecimiento del reino de los cielos requiere que subamos a la cumbre de un monte elevado.
(
Estudio-vida de Mateo, capítulo 13, por Witness Lee)