ARREPENTIRSE POR CAUSA DEL REINO DE LOS CIELOS
Sabemos que no es insignificante recibir a Cristo. No obstante, hay algo más profundo que esto. El mensaje introductorio del evangelio del reino es arrepentíos. Tenemos que arrepentirnos por causa del reino de los cielos (Mt. 3:2) porque hemos caído del dominio de Dios. Por tanto, tenemos que regresar. Necesitamos volver de la condición caída a la condición original. Tenemos que abandonar la situación caída y volvernos al dominio de Dios. Este dominio es sencillamente el reino de los cielos.
Hoy los cristianos hablan mucho de predicar el evangelio, pero ¿qué predicamos como evangelio? Quizá digamos que predicamos a Cristo. Esto es correcto, pero es inadecuado. El evangelio que se predicó al comienzo del Nuevo Testamento fue: “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado”. Dios nos hizo a Su imagen, y nos confió Su dominio. Pero caímos. Ahora debemos volver al dominio de Dios; entonces tendremos Su imagen.
(Vida necesaria para la predicación del evangelio elevado, La, capítulo 2, por Witness Lee)