La mesa del Señor reemplaza la fiesta de la Pascua. De hecho, cuando el Señor estableció Su mesa, Él y Sus discípulos asistían a la fiesta de la Pascua. De acuerdo con la manera en que los judíos solían celebrar la Pascua, sin lugar a dudas, el Señor y los discípulos compartían el pan y el vino. Por tanto, aquella reunión de la mesa que el Señor celebró con Sus discípulos se realizó más bien a manera de transición. Primero, el Señor y los discípulos comieron la pascua (Mt. 26:20-25; Lc. 22:14-18). Luego, el Señor estableció Su mesa con el pan y la copa (Mt. 26:26-28; Lc. 22:19-20; 1 Co. 11:23-26) para reemplazar la fiesta de la Pascua, porque Él iba a cumplir el tipo y ser la verdadera Pascua para nosotros (5:7). Lucas 22 nos muestra que allí se comió y se bebió de dos maneras distintas. Una manera formaba parte de la Pascua (vs. 15-18); la otra manera formaba parte de la mesa del Señor (vs. 19-20). Hoy en día celebramos la mesa del Señor sin la necesidad de ningún otro elemento transitorio.
(Lecciones básicas acerca del servicio, capítulo 5, por Witness Lee)