I. LA COMPLETA SALVACION DE DIOS
Necesitamos ver los aspectos de la completa salvación de Dios para poder ver la revelación de la transformación en vida, que tiene como fin la edificación del Cuerpo de Cristo. Estos veintiún aspectos siguen:
- La santificación en el llamamiento de Dios (1 P. 1:2b).
- La redención de Cristo (Ro. 3:24b).
- El lavamiento de nuestros pecados con la sangre de Cristo (Ap. 1:5b; 1 P. 1:2c; 1 Jn. 1:7).
- El perdón de pecados (Hch. 2:38).
- La justificación objetiva de parte de Dios (Ro. 3:24a).
- La reconciliación con Dios (Ro. 5:10a).
- La santificación objetiva con la sangre de Cristo (He. 10:29b).
- La regeneración por el Espíritu (Tit. 3:5b).
- La plena salvación de Dios (Hch. 16:31).
- La salvación diaria en la vida de Cristo (Ro. 5:10; 1 P. 2:2).
- El lavamiento por el Espíritu (1 Co. 6:11a).
- La unción del Espíritu (1 Jn. 2:20, 27).
- La santificación subjetiva en el Espíritu (1 Co. 6:11b; Ro. 15:16b; 6:19b, 22b).
- La justificación subjetiva en el Espíritu (1 Co. 6:11c).
- Dios permanece en nosotros (1 Jn. 3:24; 4:13).
- Cristo hace Su hogar en nuestros corazones (Ef. 3:17).
- La renovación por el Espíritu Santo (Tit. 3:5c; Ef. 4:23; Ro. 12:2a).
- La transformación que procede del Señor Espíritu (2 Co. 3:18b; Ro. 12:2b).
- La conformación a la imagen del Señor (Ro. 8:29a).
- La redención del cuerpo (Ro. 8:23b; Ef. 1:14b; 4:30b).
- La glorificación en la gloria de Dios (Ro. 8:30c; He. 2:10; 1 P. 5:10).
(Constitución y la edificación del Cuerpo de Cristo, La, capítulo 5, por Witness Lee)