Práctica de la vida de iglesia según la manera ordenada por Dios, La, por Witness Lee

VI. DISCERNIR LOS PROBLEMAS ACTUALES PLANTEADOS POR LOS QUE DISIENTEN

Debido a la rebelión en los últimos cuatro años y medio, muchas cosas negativas han sido habladas por los hermanos disidentes. Muchas de estas cosas se han distribuido por escrito, y algunas se han hecho lemas. En este mensaje y el próximo, mi intención es tener comunión con ustedes acerca de los veinte “problemas” planteados por los disidentes.

A. El problema de control

El primer problema es el de control; este problema consta de cuatro puntos. El punto principal que presentan los disidentes respecto a su condenación para conmigo es que tanto yo como la oficina de Living Stream Ministry controlamos a las iglesias.

1. “La centralización de control” efectuada por el centro de entrenamiento

Los hermanos disidentes usaron la expresión la centralización del control. Cuando su conspiración comenzó en septiembre de 1987, yo estaba en Taiwán dirigiendo un entrenamiento para los que sirven al Señor a tiempo completo. En diciembre del mismo año regresé a los Estados Unidos. Poco después, cuatro de los disidentes vinieron a hablar conmigo. El primero en hablar usó la expresión la centralización del control. Hasta aquel momento, nunca había oído tal expresión. Mientras esperaba saber el significado de este término, el hermano dijo que ellos consideraban mi centro de entrenamiento en Taipéi un centro para controlar a todas las iglesias sobre la tierra. Él dijo que había control al grado que todas las iglesias sobre la tierra tenían que informar al centro de entrenamiento en Taipéi acerca del horario de sus reuniones. Yo nunca había oído de tal cosa. Él dijo que ésta era mi manera de controlar a todas las iglesias. Luego dijo que yo entrenaba a los jóvenes en el centro de entrenamiento en Taipéi y que, finalmente, les dirigía y encargaba a todos que regresaran a sus iglesias a fin de que controlaran las iglesias para mi beneficio. Luego el cuarto hermano habló, recalcando que el entrenamiento en Taipéi debía ser desmantelado.

(Práctica de la vida de iglesia según la manera ordenada por Dios, La, capítulo 2, por Witness Lee)