DOS ESPIRITUS
Juan 3:6 dice: “Lo que es nacido del Espíritu, espíritu es”. Es evidente que en este versículo hay dos espíritus. El primer Espíritu lleva letra mayúscula y se refiere al Espíritu divino. El segundo espíritu lleva letra minúscula y se refiere al espíritu humano. Lo que es nacido del Espíritu divino es el espíritu humano. Nuestro espíritu humano necesita nacer del Espíritu divino.
Ezequiel 11:19, 18:31, y 36:26 nos dicen que Dios prometió dar a Su pueblo un espíritu nuevo. Este espíritu nuevo, según Ezequiel 36:26 no es el Espíritu Santo, porque en Ezequiel 36:27, después de mencionar el espíritu nuevo, dice que Dios pondrá Su propio Espíritu dentro de nosotros. Hay dos clases de espíritus. Uno es el nuevo espíritu humano y otro es el Espíritu Santo de Dios. Dios es capaz de darnos un espíritu nuevo por medio de la regeneración. Lo que Dios prometió en Ezequiel 36 todavía está siendo cumplido en Juan 3:6. En Juan 3:6 se nos dice que nuestro espíritu tiene que nacer del Espíritu divino. No es simplemente para avivarlo; no es simplemente para restaurarlo; sino que es para regenerarlo.
(Nuestro espíritu humano, capítulo 4, por Witness Lee)