Riquezas y la plenitud de Cristo y el avanzado recobro del Señor hoy en día, La, por Witness Lee

LA ABUNDANTE SUMINISTRACIÓN DEL ESPÍRITU DE JESUCRISTO

El Espíritu de Jesucristo es la corporificación de Cristo, quien es el Cristo pneumático en resurrección

Los aspectos todo-inclusivos e ilimitados de Cristo llegan a ser las riquezas de Cristo. Hoy estas riquezas han llegado a ser la gracia que disfrutamos. Esta gracia viene sobre nosotros por medio del Espíritu. El Dios Triuno es Espíritu; la máxima consumación del Dios Triuno también es el Espíritu. Más aún, después que el Señor Jesús resucitó de los muertos, también llegó a ser el Espíritu vivificante. Sin embargo, esto no significa que haya tres Espíritus, sino que éstos son sólo tres aspectos de un mismo Espíritu. En lo que a Dios se refiere, Su naturaleza es Espíritu. En lo que se refiere a la máxima consumación del Dios Triuno, y también en lo que se refiere a la encarnación, crucifixión, resurrección y ascensión de Cristo, Él también es el Espíritu. Además, todas las riquezas de Cristo que vienen a nosotros como gracia y disfrute también están relacionadas con el Espíritu.

Desde mi juventud, aprendí a valorar la gracia de Dios, pero no sabía qué era esta gracia, ni cómo este Espíritu viene a nosotros. Sin embargo, aun en ese entonces la gracia venía sobre mí cada día y el Espíritu estaba conmigo continuamente. En 2 Timoteo 4:22 se nos dice: “El Señor esté con tu espíritu. La gracia sea con vosotros”. La gracia del Señor es sencillamente el Señor que está con nuestro espíritu.

Esta mañana nos sentimos contentos y alegres mientras cantamos los himnos. Esto se debe a que el Espíritu de Dios está con nosotros. Este Espíritu de Dios que está con nosotros es la gracia. Si sus padres lo disgustan, usted aún puede cantar y aún puede decir: “¡Aleluya!”. Esto se debe a que la gracia está con usted. Si otros lo alaban y lo elogian por sus méritos, usted no se sentirá orgulloso. Al contrario, será humilde y podrá tener la clara sensación de que glorifica a Dios. Esto muestra que el Espíritu está con usted. Este Espíritu que está con usted es la gracia. Todo lo que usted no podía hacer antes, pero ahora puede hacer, es hecho gracias a la presencia del Espíritu, esto es, la presencia de esta gracia siempre oportuna.

Las riquezas de Cristo llegan a ser la abundante suministración de este Espíritu para los creyentes

Las riquezas de Cristo que podemos experimentar en el Espíritu son la abundante suministración para los creyentes. Todo lo que necesitamos nos es suministrado en este rico Espíritu. Si necesitamos a Dios, este rico Espíritu es Dios en nosotros. Si usted cree que la humanidad suya es muy pobre, el Espíritu en usted le suministrará la humanidad de Jesús. Si necesita paciencia, este Espíritu le suministrará paciencia. Si necesita palabras para expresarse, este Espíritu le dará las palabras adecuadas. Si necesita gozo o paz, este Espíritu le suministrará gozo y paz. Estos abundantes suministros son también la gracia que continuamente nos abastece interiormente.

Este Espíritu mora en los creyentes para ser un solo espíritu con ellos a fin de que experimenten a Cristo y le apliquen en su vivir

Ya vimos que esta gracia es una persona, y que esta persona es el Espíritu de Dios. El Espíritu de Dios es sencillamente la realidad de Cristo, y Cristo es la corporificación del Dios Triuno. Al final, lo que viene a nosotros es el Espíritu. Cuando nosotros le disfrutamos, Él llega a ser la gracia. Por lo tanto, la clave hoy es el Espíritu. Él no está en nuestros oídos, ni en nuestra mente, sino en nuestro espíritu. En 1 Corintios 6:17 leemos: “El que se une al Señor, es un solo espíritu con Él”. Esto nos muestra que el Espíritu puede llegar a ser un solo espíritu con nuestro espíritu. El resultado final de esta experiencia es que todo nuestro ser llegará a ser la gracia de Cristo, Aquel que es todo-inclusivo e ilimitado.

Pablo al final de sus epístolas con frecuencia decía que la gracia y la paz estén con nosotros. Sabemos que la paz proviene de la gracia y que la gracia es el Espíritu que está con nosotros. Ahora este Espíritu con Su abundante suministración está en nuestro espíritu. Cada vez que ejercitamos nuestro espíritu y lo usamos, podemos contactar al Espíritu y podemos experimentar al Dios de gracia. También podemos experimentar Sus aspectos todo-inclusivos e ilimitados. Estos aspectos son las riquezas de Cristo que nosotros disfrutamos.

(Mensaje dado por el hermano Witness Lee en Ciudad Quezón, las Filipinas, el 23 de marzo de 1989)

(Riquezas y la plenitud de Cristo y el avanzado recobro del Señor hoy en día, La, capítulo 2, por Witness Lee)