Caos Satánico en la vieja creación y la economía divina para la nueva creación, El, por Witness Lee

III. REUNIRSE COMO UNA IGLESIA LOCAL APROPIADA

A fin de practicar la vida de iglesia en la economía de Dios, tenemos que reunirnos como la iglesia local apropiada (Hch. 8:1; 13:1; Ap. 1:11). Los cristianos no son como las mariposas. Las mariposas son muy independientes y muy hermosas. Nosotros los cristianos somos como las abejas y como las ovejas. A las abejas les gusta mantenerse en grupo. Cuando se mueven, se mueven juntas. También a las ovejas les gusta mantenerse juntas, como rebaño. Cuando siguen a su pastor, lo hacen en una forma apropiada y ordenada. El Señor Jesús nos llamó la manada pequeña (Lc. 12:32). Pedro exhortó a los ancianos a que pastorearan la grey de Dios (1 P. 5:2). Pablo también exhortó a los ancianos de Efeso a que pastorearan la iglesia de Dios (Hch. 20:28). Nosotros, como rebaño de Dios, tenemos que aprender a reunirnos con regularidad. Los cristianos son un pueblo que se reúne.

A. Sobre el terreno genuino de la unidad del Cuerpo

Nosotros debemos reunirnos como la iglesia local adecuada sobre el terreno genuino de la unidad del Cuerpo (Ef. 4:3-4; Jn. 17:21-23).

B. Como expresión local del Cuerpo universal de Cristo

Nos reunimos sobre el terreno de la iglesia como expresión local del Cuerpo universal de Cristo. Cristo no tiene muchos cuerpos. El solamente tiene uno, pero este Cuerpo se expresa en muchas localidades. Las iglesias locales, las cuales están basadas en el terreno de la unidad, son las expresiones locales del Cuerpo universal de Cristo.

C. Como un candelero local de oro

Una iglesia local apropiada es un candelero local de oro (Ap. 1:12, 20b). El oro representa la naturaleza divina. Esto muestra que las iglesias como candeleros de oro, están constituidas de la naturaleza divina.

D. Como columna y fundamento de la verdad para la manifestación de Dios en la carne: el gran misterio de la piedad

La verdad es el Dios Triuno, del cual Cristo es el centro y la circunferencia a fin de que la iglesia como Cuerpo de Cristo, como organismo del Dios Triuno, sea producida. La iglesia es la columna que sostiene la verdad y es el fundamento que sustenta dicha verdad. En nuestra vida diaria debemos vivir a Cristo. En nuestras reuniones debemos exhibir a Cristo. Cristo debe ser nuestro todo para que el Cuerpo le exprese a El como organismo del Dios Triuno. Esta es nuestra verdad.

Fuera del recobro del Señor no se oye esta verdad. Es posible que algunos hablen de la vida matrimonial y familiar. Tal vez otros hablen del evangelio en una forma fundamental, diciéndoles a las personas que ellas son pecadoras y que Dios las ama, que Cristo murió por ellas, y que si creen en El, serán perdonadas e irán al cielo. Entonces pasan a decirles que después de ser salvas, deben comportarse rectamente para glorificar al Padre. Pero ¿quién habla de la iglesia como columna y fundamento de la verdad? Según la revelación divina, la verdad es el Dios Triuno, quien tiene a Cristo el Hijo como incorporación y como la centralidad y universalidad de Su economía divina para tener una iglesia que le exprese y sea Su organismo.

En 1 Timoteo 3:15-16a dice: “Pero si tardo, escribo para que sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y fundamento de la verdad. E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad”. La verdad es el gran misterio de la piedad, el cual es la manifestación de Dios en la carne.

(Caos Satánico en la vieja creación y la economía divina para la nueva creación, El, capítulo 5, por Witness Lee)