Estudio-vida de Jeremías y Lamentaciones, por Witness Lee

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III. JEHOVÁ, EL MARIDO, CORRIGE A ISRAEL

La corrección por parte de Jehová, el Marido, es hallada en 4:3-31.

A. La amonesta instándole a arar su tierra en barbecho y a no sembrar entre espinos

Jehová la amonestó instándole a arar su tierra en barbecho y a no sembrar entre espinos (v. 3); Él también la amonestó instándole que se circuncidara para Jehová y quitase los prepucios de su corazón (v. 4a). Esto indica que al afanarse en adorar ídolos, ellos estaban sembrando entre espinos. Pero el terreno apropiado, en el que debían haber sembrado, permanecía en barbecho, sin ser tocado. Ellos debían sembrar todo en presencia de Dios, con Dios y para Dios. Esto es usar la tierra correctamente. Pero en lugar de ello, ellos adoraron ídolos y sembraron entre espinos. Por tanto, Dios les aconsejó que cesaran de sembrar de ese modo y volvieran a la tierra en barbecho.

B. La pone sobre aviso mediante males, ayes y aflicciones

En los versículos del 4b al 31 Jehová la pone sobre aviso mediante males (calamidades), ayes y aflicciones. Él les hizo tal clase de advertencia por medio de toda clase de padecimientos.

1. Su ira sale como fuego

En el versículo 4b Jehová dijo que Su ira saldrá como fuego y quemará a Israel. Tal fuego traería calamidades.

2. Mal y gran destrucción viene del norte

Jehová le dijo que hará venir el mal y una gran destrucción desde el norte, refiriéndose a Babilonia (v. 6b).

3. Un león sale para poner su tierra en desolación y sus ciudades en ruinas

“Un león ha salido de su espesura, / y el destructor de naciones está en marcha. / Ha salido de su lugar para poner tu tierra en desolación; / tus ciudades quedarán en ruinas, / sin habitantes” (v. 7). Aquí el león se refiere a Nabucodonosor, el rey de Babilonia. Nabucodonosor era aquel destructor de naciones, que dejaría las ciudades de Israel en ruinas.

4. Desmaya el corazón del rey y el de los príncipes

El corazón del rey y el de los príncipes desmayará; los sacerdotes estarán atónitos, y se asombrarán los profetas (v. 9).

5. La espada llega hasta el alma

En el versículo 10 Jehová dice que la espada llegará hasta el alma.

6. Un viento abrasador viene de Él

Un viento abrasador, demasiado fuerte para aventar y para limpiar, vendrá de Jehová (vs. 11-12). Ésta es otra indicación de que Dios enviará toda clase de calamidad para disciplinar al rebelde Israel.

7. El enemigo sube como nubes

El enemigo subirá como nubes, y sus carros como torbellino; sus caballos son más ligeros que las águilas (v. 13). Ésta es una descripción de la rapidez del ejército babilónico.

8. Sitiadores vienen de tierra lejana

Según el versículo 16b, sitiadores vienen de tierra lejana, alzando su voz contra las ciudades de Judá.

9. Se oye el sonido de la trompeta

En el versículo 19b Jehová les dice que oyen el sonido de la trompeta, sonido de alarma de guerra.

10. Destrucción sobre destrucción devasta toda la tierra

Destrucción sobre destrucción devastará toda la tierra (v. 20). ¡Qué calamidades habrá!

11. La tierra fructífera se convierte en desierto

La tierra fructífera se convierte en desierto, y todas sus ciudades son derribadas. Una desolación es toda la tierra (vs. 26-27). Esta desolación es causada por el ejército babilónico.

12. Ella se convierte en la desamparada

Israel se convierte en la desamparada. Aunque ella se vista de escarlata, se adorne con atavíos de oro y agrande sus ojos pintándoselos, en vano se embellece. Sus amantes la menosprecian; ellos buscan su vida (v. 30).

13. Su clamor es como el de mujer que está de parto

El clamor de Israel será como el de mujer que está de parto, y su angustia como de primeriza. Su voz se ahogará jadeando por aire, y ella extenderá sus manos diciendo: “¡Ay de mí, / porque mi alma desmaya ante los asesinos!” (v. 31).

C. La corrección de Jehová, el Marido, es Su reacción a la maldad de Israel, Su esposa

La corrección de Jehová, el Marido, es Su reacción a la maldad de Israel, Su esposa (vs. 4, 17-18, 22). Su disciplina es Su reacción a la pecaminosidad de ella.

(Estudio-vida de Jeremías y Lamentaciones, capítulo 7, por Witness Lee)