I. LA PREPARACION DEL OBRERO
A. Resumen (7:1-5)
En Cantar de los cantares 7:1 dice: “¡Cuán hermosos son tus pies en las sandalias, oh hija de príncipe! Los contornos de tus muslos son como joyas, obra de mano de excelente maestro”. El Espíritu Santo responde a la pregunta que hace una tercera persona en la sección anterior. Aparentemente, estas palabras son dichas por una tercera persona; en realidad, revelan la intención del Espíritu Santo. Lo primero que se mencionan son los pies.
“Hija de príncipe” es una alusión a su origen noble. Ella es parte de la familia real. En la Biblia la palabra “sandalias” se refiere explícitamente al “evangelio de la paz” (Ef. 6:15). El énfasis se hace en la preparación para la obra. Por lo tanto, lo primero que se menciona son las sandalias. La labor del evangelio es indispensable. “Los muslos” se refieren a la capacidad de mantenerse en pie. Esto significa que esta capacidad viene exclusivamente de Dios. Si queremos que nuestros muslos sean como joyas, el encaje del muslo debe ser quebrantado hasta descoyuntarse (Gn. 32:25). El poder para participar en la obra proviene de Dios. A esto se refiere la expresión “obra de mano de excelente maestro”.
El versículo 2 dice: “Tu ombligo como una taza redonda que no le falta bebida. Tu vientre como montón de trigo cercado de lirios”. El ombligo y el vientre se refieren a la vida interna de la doncella. “Bebida” se puede traducir como “vino mezclado”. Si la bebida se refiere a la sangre del Señor Jesús, el montón de trigo debe de referirse a Su carne. Verdaderamente comemos Su carne y bebemos Su sangre. El vino mezclado se refiere a la vida que el Espíritu Santo nos da por medio de la sangre del Señor Jesús. El montón de trigo cercado de lirios indica que recibimos este trigo por medio de la fe.
El versículo 3 dice: “Tus dos pechos, como gemelos de gacela”. No dice que los dos pechos se apacientan entre lirios. Por eso, la expresión no se refiere a su crecimiento delante de Dios, sino a su capacidad de alimentar a otros. La fe y el amor mencionados en este versículo son la medida y el poder con los cuales alimentamos a otros.
Dice el versículo 4: “Tu cuello, como torre de marfil; tus ojos, como los estanques de Hesbón junto a la puerta de Bat-rabim; tu nariz, como la torre del Líbano, que mira hacia Damasco”. Esta “torre de marfil” no es la misma torre de la que se habla previamente cuando se dice que su cuello era como la torre de David. Ahora ella ha sido quebrantada por Dios; así que, su cuello es como marfil. Pero esto no significa que ella sea pasiva. Cuando ella defiende los intereses de Dios, es tan fuerte como una torre. No obstante, esta torre es de marfil, lo cual se refiere al sufrimiento y la muerte que ella experimenta para que se cumpla el propósito de Dios.
“Tus ojos como estanques”. Esta descripción difiere de la anterior, en la cual hace referencia a los ojos como ojos de paloma. Un estanque no está escondido de la luz como un pozo, y no fluye como una fuente. Un estanque está abierto a la luz pero al mismo tiempo sus aguas son quietas. En otras palabras, son aguas mansas. Tener ojos como los estanques denota pureza de corazón delante de Dios. Esta persona no sólo está libre de contaminación sino que está en completo reposo. Es por eso que la doncella conoce la voluntad de Dios. “Hesbón” significa inteligencia, mientras que “Bat-rabim” significa hija de muchos.
La nariz no se había mencionado hasta ahora, pues la facultad del olfato se encuentra solamente en los creyentes maduros. En los asuntos espirituales, muchos tienen ojos penetrantes y oídos sensibles; pero no muchos tienen una nariz capaz de percibir olores. Este sentido no proviene de las palabras habladas ni de las cosas visibles; es una facultad interna que va más allá de los sentidos y de las palabras y permite que las personas diferencien los buenos olores de los malos. Esta especie de intuición espiritual capacita a la persona para identificar las cosas de Dios, lo cual no se puede lograr por medio de la razón ni de la lógica, sino de un discernimiento espontáneo que la persona ejerce en asuntos espirituales. Además, el sentido del olfato capacita a la persona para identificar tanto los malos olores como los buenos. Hay muchas enseñanzas que no se pueden considerar erróneas y a muchas personas no se les encuentra ninguna falta, pero uno puede percibir que algo no está bien en ellas. Este es el sentido del olfato. “Tu nariz, como la torre del Líbano, que mira hacia Damasco”. Esto habla de su altura y agudeza. En la actualidad son muchos los creyentes que tienen un olfato deficiente.
El versículo 5 dice: “Tu cabeza encima de ti, como el Carmelo; y el cabello de tu cabeza, como la púrpura del rey suspendida en los corredores”. El monte Carmelo fue el lugar donde Elías demostró su poder en la presencia de Jehová. Allí él luchó por Dios, y Dios escuchó su oración. La comparación de la cabeza con el Carmelo indica que la mente y el corazón se entregan a Dios. El “cabello de tu cabeza” se refiere nuevamente al poder de la consagración. Este poder es lo suficientemente fuerte como para mantener al rey en los corredores. Esto significa que los creyentes son fortalecidos por el Señor, y que son lo suficientemente fuertes para forzarlo a responder a sus oraciones. En la etapa inicial del desarrollo de la doncella, ella no tuvo esta experiencia; Dios no podía darle este poder. Es solamente cuando ella es completamente librada de sí misma, su consagración y su capacidad de obediencia son puestas completamente delante del Señor, y ella es llena del pensamiento de la gloria del Señor hasta que su cabello toma el color púrpura, que Dios se atreve a confiarle el poder que la capacitará para capturar al rey. En realidad, el rey no es prisionero suyo, ya que ella lo mantiene en los corredores con el propósito de que se lleve a cabo la misma voluntad del Señor y se cumpla Su promesa. Ella ora constantemente al Rey de esta manera: “Cumple Tu plan y actúa conforme a Tu palabra”. Ella ha aprendido a sentarse en el trono y controlar todas las cosas.
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Cantar de los cantares, El, capítulo 6, por Watchman Nee)