Lo ilimitado y todo-inclusivo que es Cristo, por Witness Lee

II. UN HOMBRE DE SANGRE Y CARNE EN EL TIEMPO: UNA CRIATURA

Otro aspecto de lo que es Cristo, es que Él es un hombre. Como Dios, Él no está directamente relacionado con nosotros, sino que está relacionado indirectamente. Dos mil años después que Él creó al hombre, Él vino para decirle a Abraham: “Abraham, haré que tu simiente sea una bendición para las naciones”. ¿Quién era esta simiente? Pablo nos dice después que esta simiente era Jesucristo. Mateo 1:1 dice: “Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham”. Este hijo de Abraham es Cristo. Después que la promesa fue dada, pasaron otros dos mil años, y cuando se completaron cuatro mil años de la historia humana, Él vino. ¿Cómo vino? Es maravilloso que Él sea el Padre, el Hijo y el Espíritu para alcanzar al hombre; cuando Él llegó al hombre, Él vino como el Espíritu. El Espíritu Santo vino sobre una mujer soltera, una virgen pura llamada María. Él entró en el vientre de esta virgen y fue concebido allí. Este Dios Todopoderoso, el Dios Triuno, el Señor que existe en Sí mismo y para siempre, el eterno Señor, entró en el vientre de una pequeña virgen para ser concebido, y Él permaneció en este vientre por nueve meses. Él permaneció allí sujeto a las leyes naturales que Él mismo había ordenado en la creación. De acuerdo con las leyes naturales establecidas por Él mismo, la concepción humana debe tardar nueve meses; así que Él esperó ahí por nueve meses. Luego nació de la virgen para llegar a ser un hombre de sangre y carne. Este hombre tenía nariz, ojos, piel, carne, huesos y sangre. Ciertamente Él era un hombre, pero este hombre poseía no sólo la naturaleza humana, sino que también poseía la naturaleza divina. La concepción de Cristo fue una mezcla de dos naturalezas, la divina y la humana; por lo tanto, los elementos dentro de Él eran la divinidad mezclada con la humanidad. Por esta razón, Isaías 9:6 dice que el niño nacido en el pesebre era el Dios fuerte. Éste era el Dios-hombre, que era tanto Dios como hombre, uno que era Dios y, sin embargo, también hombre.

(Lo ilimitado y todo-inclusivo que es Cristo, capítulo 1, por Witness Lee)