LA MANERA DE PRACTICAR
LA REUNIÓN DEL PARTIMIENTO DEL PAN
Ahora debemos ver cómo practicar la reunión del partimiento del pan. Es posible que pensemos que tenemos experiencia, pero la estructura de nuestras reuniones no es clara y definida. Cada reunión debe tener cierta estructura y la reunión del partimiento del pan no es la excepción. El enfoque de la reunión del partimiento del pan es hacer memoria del Señor; no obstante, esto no significa recordar la muerte del Señor, sino recordar al Señor mismo (1 Co. 11:24-25). Cuando recordamos al Señor, anunciamos Su muerte (v. 26); es decir, mostramos, exhibimos, la muerte del Señor. Sin embargo, lo que recordamos no es la muerte del Señor, sino más bien, al Señor mismo.
Recordar al Señor es disfrutar al Señor
Recordar al Señor equivale a disfrutarle. En la noche en que el Señor Jesús fue traicionado, “tomó pan; y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Esto es Mi cuerpo que por vosotros es dado; haced esto en memoria de Mí” (vs. 23b-24). Estos versículos nos muestran que recordar al Señor significa comerle. El versículo 25 dice: “Asimismo tomó también la copa, después de que hubieron cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto establecido en Mi sangre; haced esto todas las veces que la bebáis, en memoria de Mí”. El enfoque de recordar al Señor es disfrutar al Señor, quien se hizo carne, pasó por la muerte y la resurrección, y ascendió. En la reunión del partimiento del pan hay dos símbolos sobre la mesa: el pan, que representa el cuerpo del Señor, y la copa, que representa la sangre del Señor. El hecho de que el cuerpo y la sangre están separados representa la muerte del Señor. Por consiguiente, en la reunión del partimiento del pan, recordamos al Señor encarnado, quien pasó por el vivir humano en la tierra y entró en la muerte. Después de esto, Él resucitó, ascendió a lo alto y llegó a ser el Espíritu vivificante para producirnos a nosotros, los muchos hijos de Dios, como Su Cuerpo. Recordamos al Señor disfrutándole como tal Señor. Éste debe ser el centro de nuestros himnos y oraciones.
Una vez asistí a la reunión del partimiento del pan en la que una hermana pidió que se cantara el himno “Aviva Tu obra, oh Dios” (Hymns, #797). Este himno no es apropiado para la reunión del partimiento del pan. Quizás esta hermana tuvo deseos de que se cantara ese himno porque la iglesia estaba promoviendo la carga de predicar el evangelio y de ganar a las personas; sin embargo, cuando venimos a la reunión del partimiento del pan a recordar al Señor, debemos recordar al Señor y disfrutarle. Mientras le disfrutamos, Él nos disfruta a nosotros; si nosotros no le disfrutamos, Él tampoco nos podrá disfrutar. Cuanto más le disfrutemos, más Él nos disfrutará. Por lo tanto, debemos recordar que en la reunión del partimiento del pan no debemos pensar en otra cosa que no sea el Señor. Esto es algo que todos debemos aprender.
Los santos de más experiencia deben espontáneamente expresar un modelo apropiado en la reunión del partimiento del pan; de lo contrario, los santos de menos experiencia no se mantendrán en el enfoque de la reunión. Por lo tanto, los santos de más experiencia deben asumir la responsabilidad por la dirección de la reunión.
(
Agresividad apropiada que requieren los que sirven al Señor, La, capítulo 5, por Witness Lee)