Era del nuevo hombre, La, por Witness Lee

ABOLIÓ LAS ORDENANZAS A FIN DE CREAR UN SOLO Y NUEVO HOMBRE

El Señor nos ha librado del pecado, del diablo, del viejo hombre y del mundo. A la postre Él nos librará de las ordenanzas con el propósito de que seamos manifestados como un solo y nuevo hombre. Por ende, Efesios 2:15 dice: “Aboliendo en Su carne la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en Sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre”.

La intención y el propósito de Dios al crear al hombre

Necesitamos luz al leer la Biblia. El deseo que Dios tiene de obtener un solo y nuevo hombre fue revelado cuando creó a Adán. Cuando Dios creó al hombre, no creó muchas personas. Dios creó un solo hombre, Adán (Gn. 2:7), pero Adán era un hombre corporativo. La Biblia dice que Dios creó al hombre a Su imagen y conforme a Su semejanza (1:26). Esto significa que el hombre es una fotografía de Dios a fin de reflejar a Dios. Dios colocó a este hombre en una posición alta. Dios no creó miles de hombres que le reflejaran; Él creó un solo hombre para que fuese Su reflejo. Sin embargo, el hombre fue arruinado por Satanás. Por ende, se vio frustrado el propósito que Dios tenía de que el hombre fuese Su reflejo. Puesto que el primer hombre, Adán, fue dañado, el Señor Jesús vino a la tierra para ser el segundo hombre (1 Co. 15:47) a fin de lograr el propósito original que Dios tuvo al crear al hombre. Cuando el Señor Jesús estaba en la tierra, Él era la imagen, el reflejo, de Dios (Col. 1:15).

(Era del nuevo hombre, La, capítulo 7, por Witness Lee)