Visión celestial, La, por Witness Lee

DIOS ANHELA OBTENER LA IGLESIA

Si deseamos ser creyentes en todo el sentido de la palabra, no solamente necesitamos la visión de Cristo, sino también la visión de la iglesia. Necesitamos ver que el deseo de Dios es obtener la iglesia. El Espíritu Santo nos mostrará que el propósito de Dios al crear el universo, fue producir la iglesia. La redención también tiene como fin la iglesia. Todo lo que Dios hace tiene como meta la iglesia; así que, toda obra y todo ministerio deben tener como objetivo la iglesia. La finalidad de la predicación del evangelio, de la edificación de los santos y de la enseñanza de la Biblia también debe ser la iglesia. Fuimos salvos por causa de la iglesia, no de nosotros mismos ni con ningún otro propósito. El deseo del corazón de Dios es obtener la iglesia, y nosotros fuimos salvos con el fin de ser edificados en ella. Esta debe ser nuestra visión.

Creo firmemente que si nos consagramos al Señor y nos aunamos a Sus intereses, tarde o temprano El ha de abrir nuestros ojos y ha de revelarnos que Su anhelo es obtener la iglesia. Todo lo demás es secundario; lo primordial es la iglesia, el deseo del corazón de Dios.

Ver esto no sólo ha de rescatarnos de nuestros conceptos erróneos, sino que cambiará radicalmente nuestro servicio cristiano. Entenderemos que el propósito de Dios es obtener la iglesia y no solamente propagar el evangelio para que otros puedan ser traídos al Señor, ni sólo lograr que algunos sean llevados a buscar al Señor, amarle y ser espirituales. Todo lo que hagamos en nuestra obra y servicio para el Señor tendrá como fin la edificación de la iglesia. Lo que seamos y lo que hagamos ha de ser para la iglesia.

Examinemos el ministerio del apóstol Pablo. ¿Qué hizo Pablo después de haber sido cambiado y de adoptar este tipo de servicio ofrecido conforme a la visión? Laboró con la iglesia como única meta. Hablando con propiedad, Pablo no hacía su propia obra; todo lo que hacía era para el beneficio de la iglesia. Aparte de ésta, él no tenía ningún interés. Todo lo que fue y lo que hizo era para el bien de la iglesia. Si se le hubiera quitado la iglesia, él se habría quedado sin nada.

Les sugiero que se pongan a prueba y se comparen con el apóstol Pablo. Me preocupa que muchos tengan intereses aparte de la iglesia. Tal vez hagan muchas cosas buenas, pero éstas son ajenas a la iglesia. Esto comprueba que están errados. La iglesia es la mejor prueba para mostrarnos quiénes somos y cuál es nuestra condición, pues ella es el deseo del corazón de Dios.

(Visión celestial, La, capítulo 3, por Witness Lee)