Pláticas adicionales sobre la vida de iglesia, por Watchman Nee

B. EL LIMITE DE LA LOCALIDAD

Una iglesia también requiere una segunda base. Sin ella tampoco existe el terreno de la iglesia. Ustedes probablemente preguntarán: Puesto que todos nosotros expresamos la autoridad y vivimos bajo la autoridad del Espíritu Santo, ¿no es esto suficiente para establecer la iglesia? No, no lo es. La Biblia nos muestra claramente dos cosas que deben existir a fin de establecer la iglesia: en primer lugar, la autoridad del Espíritu Santo; en segundo lugar, el límite de la localidad. Si ustedes tampoco ven esto, no podrán comprender el terreno de la iglesia. ¿Les parece extraño? ¿Les parece esto como si estuvieran cayendo desde 3000 metros de altura, desde el cielo hasta la tierra? Sí, verdaderamente, la iglesia está también en la tierra. La iglesia es en parte celestial, y en parte está en la tierra. La parte celestial trata de la autoridad del Espíritu Santo; la parte terrenal trata del límite de la localidad. Este es un asunto maravilloso en la Biblia. La Biblia nos muestra claramente esta única cosa, que la iglesia pertenece absolutamente a una localidad, tal como la iglesia en Jerusalén: Jerusalén es un lugar; la iglesia en Corinto: Corinto es un lugar; la iglesia en Antioquía: Antioquía es una ciudad; la iglesia en Efeso: Efeso es un puerto. En la Biblia, el terreno de la iglesia es la localidad en donde esté la iglesia. Todas las iglesias toman la localidad como límite.

En esto hay un punto especial; por favor presten atención a ello. Por ejemplo, si los hermanos y hermanas que están en Shangai desean basarse en el terreno de la iglesia, sólo pueden basarse en el terreno del Espíritu Santo y de Shangai. Deben basarse en el terreno del Espíritu Santo, y también en el terreno de Shangai, porque Shangai es la localidad donde ellos viven. Una vez que se cambia esta localidad, inmediatamente se pierde el terreno de la iglesia. Permítanme dar unos cuantos ejemplos.

La iglesia y las iglesias

En 1 Tesalonicenses 2:14 dice: “Las iglesias en Judea”. La iglesia mencionada aquí es plural en griego, inglés y chino. Se trata de “las iglesias en Judea”. ¿Por qué está en plural? Es porque en aquel tiempo Judea era una provincia de Roma. Puesto que una provincia incluye muchas localidades, hay, por lo tanto, muchas iglesias. Así que, no se dice: “la iglesia en Judea”, sino “las iglesias en Judea”. En las Escrituras solamente se encuentra la iglesia local, no la iglesia provincial. Lo mismo es verdad con respecto a Galacia, la cual es una provincia que consta de muchas localidades; por lo tanto, 1 Corintios 16:1 dice: “las iglesias de Galacia”. Efeso es un puerto, una localidad; por lo tanto, la iglesia en Efeso está en singular (Ap. 2:1). Este punto está muy claro en la Biblia. Por ejemplo, Filadelfia era una ciudad, y solamente una iglesia existió allí (Ap. 3:7). Asia, la cual hoy es Asia Menor, era una gran provincia; por lo tanto, la Biblia dice: “las siete iglesias en Asia”, y no la iglesia en Asia (Ap. 1:4, 11).

(Pláticas adicionales sobre la vida de iglesia, capítulo 1, por Watchman Nee)