Vida cristiana, La, por Witness Lee

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I. LA RESURRECCIÓN VENCE LA MUERTE

La vida puede ser sojuzgada por la muerte, pero la resurrección vence la muerte; así que, la resurrección es más fuerte que la vida. Debemos examinar tal afirmación. ¿Fue sojuzgada la vida del Señor Jesús? Si usted me dice que sí, le diré que no; y si usted me dice que no, le diré que sí. Si la vida de Jesús no fue sojuzgada, ¿cómo fue posible que lo mataran? En Hechos 3:15 Pedro les dijo a los varones de Israel que ellos habían matado al Autor de la vida. Vemos que fue posible sojuzgar la vida del Señor Jesús, porque lo mataron. Sin embargo, finalmente Él no quedó sojuzgado. Por tres días Él fue sojuzgado temporalmente, pero después de esos días no lo fue. Aparente, visible y físicamente, Él fue sojuzgado. Pero intrínseca, invisible y espiritualmente, no lo fue.

Al ser crucificado, Él despojó a todos los principados y potestades mencionados en Colosenses 2:15. Además, mientras estaba sepultado físicamente en la tumba, Su espíritu estaba muy activo. Después de morir en la carne, Cristo todavía seguía activo en Su espíritu para proclamar a los espíritus encarcelados, a los ángeles rebeldes, la victoria de Dios sobre Satanás por medio de Él (1 P. 3:18b-19). Mientras el cuerpo de Cristo estaba sepultado en la tumba, Él estaba activo en Su espíritu en el Hades, así que no había sido sojuzgado. Finalmente, Él venció la muerte, y la muerte fue sojuzgada. Él salió de la muerte. Así que, por un lado, Él fue sojuzgado por la muerte; pero por otro, la muerte no lo sojuzgó.

(Vida cristiana, La, capítulo 7, por Witness Lee)