UN BREVE ESBOZO DE LA OBRA DEL HERMANO NEE
Predica el evangelio a sus compañeros de clase
Ahora que hemos visto las revelaciones que el Señor nos ha dado y la práctica de la vida de iglesia con base en nuestra historia, nos gustaría ver la obra del hermano Nee. Inmediatamente después de ser salvo en 1920, el hermano Nee empezó a trabajar para el Señor. Todavía era un estudiante de secundaria. Después de ser salvo, él comenzó a predicarles el evangelio a sus compañero de clases. Me dijo personalmente que él ayunaba y oraba cada sábado como preparación para predicarles el evangelio a sus compañeros de clases al día siguiente. Su escuela tenía menos de ciento cincuenta estudiantes. Como en un año, casi todos los estudiantes que había en la escuela fueron salvos. Por su predicación hubo un verdadero avivamiento en esa escuela. Por aquella época uno veía estudiantes en el colegio, sentados leyendo la Biblia debajo de los árboles, y otros estudiando la Biblia y orando juntos en el césped.
Las primeras publicaciones
En 1922 la vida de iglesia empezó en el pueblo natal del hermano Nee. En 1923 él publicó su primera revista llamada El testimonio actual. Yo la leí a principios de 1925, y me costó mucho entenderla porque el contenido era muy profundo. Recibí una copia de esta publicación por medio de mi segunda hermana, quien estudiaba en un seminario para mujeres en Nanking. Ella había recibido una copia de algunos escritos del hermano Nee y la trajo consigo a casa en el verano. El testimonio actual contenía artículos referentes a los principios de la muerte, resurrección y ascensión de Cristo.
En 1924 el hermano Nee fue excomulgado de la reunión en su pueblo natal. Se fue a vivir en Pagoda, y en 1925 empezó a publicar su segunda revista llamada El cristiano. Esta era una publicación mensual, la cual se componía normalmente de unas sesenta o setenta páginas. En dicha revista el hermano Nee explicó a fondo los primeros tres capítulos de Apocalipsis, y pasó mucho tiempo en las siete epístolas a las siete iglesias, que se mencionan en los capítulos dos y tres. En esos mensajes acerca de las siete epístolas, se expuso la situación del cristianismo caído, y la vida apropiada de iglesia fue revelada. Muchos jóvenes por toda China leyeron esos mensajes, y sus ojos fueron abiertos. Yo fui uno de esos jóvenes. Por medio de esos mensajes vi los males del denominacionalismo, y también recibí la visión de la iglesia. Esta revista tuvo un total de veinticuatro ediciones. Aquellos que leyeron estas ediciones de una manera apropiada, recibieron revelación e inspiración. Era asombroso ver cómo el hermano Nee podía explicar las Escrituras de una manera tan maravillosa a la edad de veintidós años. En esa revista también presentó los primeros dos capítulos de Génesis. El aplicaba todos los días de la creación a Cristo. Compartió que la tierra que surgió de las aguas el tercer día, era un cuadro de Cristo saliendo de la muerte. Cristo era la buena tierra, resucitado al tercer día para producir todo tipo de vida.
El principio de la vida de iglesia en Shanghái
y el contacto que el hermano Nee
tuvo con los Hermanos
En 1926 el hermano Nee fue a Shanghái para empezar la vida de iglesia allí. Entre 1922 y 1927, el hermano Nee fue invitado a ministrar en muchos grupos cristianos, pero después de que la iglesia en Shanghái se estableció y se fortaleció, él recibió sólo unas cuantas invitaciones. Desde 1927 hasta que el hermano Nee entró en la gloria, él fue invitado solamente una vez por las denominaciones, y esta invitación fue a un seminario Bautista del Sur en mi pueblo natal. Fue allí donde nos conocimos, y él se hospedó en mi casa. En 1938 y 1939 fue invitado a Inglaterra y a Escandinavia por algunos cristianos de allí. Aquella invitación era de una categoría diferente.
Durante los años 1925 a 1927, el hermano Nee leyó algunos de los escritos de los Hermanos británicos, los Hermanos cerrados. Como hicimos notar, los Hermanos fueron levantados por el Señor alrededor de los años 1825 a 1828, pero en quince años aproximadamente, se dividieron en tres grupos grandes. Uno de ellos estaba con Darby; este grupo era considerado el de los Hermanos exclusivos, los Hermanos cerrados. Otro grupo, bajo la dirección de George Müller era considerado el de los Hermanos abiertos, o Hermanos de Plymouth. El grupo más estricto estaba bajo la dirección de Benjamín Newton, quien estaba en desacuerdo con Darby respecto del arrebatamiento de los santos. El hermano Nee leyó muchos de los escritos de John Nelson Darby. Estos escritos eran asombrosos, y él recibió mucha ayuda de ellos. Debido a la ayuda que el hermano Nee recibió, la manera en que conducíamos nuestras reuniones en los primeros días de la vida de iglesia se aproximaba mucho a la manera en que lo hacían los Hermanos. Algunos hasta nos llamaban la versión china de los Hermanos británicos.
El hermano Nee tomó todos los puntos buenos de diferentes prácticas cristianas y los agrupó en la vida de iglesia. Los Hermanos, especialmente los que estaban en Inglaterra, descubrieron que había en China un grupo de cristianos que el Señor había levantado de una manera asombrosa, así que empezaron a tener correspondencia con el hermano Nee. Entonces propusieron que ellos mandarían algunos a que nos visitaran. El hermano Nee convino en recibirlos pero les dijo que no trajeran consigo su trasfondo. Ellos prometieron no hacerlo, así que vinieron a Shanghái en 1931. Este grupo, los Hermanos cerrados, era considerado el mejor entre los Hermanos en aquel entonces. Un hermano llamado James Taylor era su maestro. El salón Elden, que fue el primer salón que tuvo la iglesia en Los Angeles, era originalmente el salón de estos Hermanos. Le compramos el salón Elden al hijo de James Taylor en 1965. Entre los que fueron a Shanghái estaban Charles Barlow y W. J. House. Estos dos fueron los conferencistas entre ellos. En vez de venir a nosotros como creyentes sencillos según se había acordado, trajeron consigo las prácticas de los Hermanos. Esto causó muchos problemas y puso al hermano Nee en una situación difícil.
Ellos invitaron al hermano Nee a que los visitara, y él lo hizo en 1933. Viajó por Francia y se quedó en Inglaterra por un tiempo. Un hermano de Inglaterra lo trajo a los Estados Unidos y a Vancouver, Canadá. James Taylor escribió muchas cartas, y hasta hay una crónica de su correspondencia con el hermano Nee durante ese tiempo. En ese mismo año el hermano Nee volvió de Europa a China. En esa época yo fui lanzado de lleno a la obra en Shanghái junto con él. Me contó personalmente todo lo concerniente a su visita al extranjero. Los Hermanos le prometieron que si él tomaba el camino que ellos le presentaban, adquirirían un terreno para que él construyera un gran salón de reuniones en Shanghái. También le prometieron otras cosas. El les dijo “no” a todas sus propuestas.
(
Historia de la iglesia y las iglesias locales, La, capítulo 5, por Witness Lee)