Mensajes de vida, tomo 1 (#1-41), por Witness Lee

EL CRECIMIENTO EN VIDA ES EL AUMENTO DE CRISTO

En el mensaje anterior vimos que la edificación genuina equivale al crecimiento en vida. En el lenguaje del Nuevo Testamento, ser edificados equivale a crecer. Sin embargo, la mayoría de los cristianos considera el crecimiento simplemente como una especie de mejora. Pero es imposible experimentar una mejora significativa sin ningún crecimiento. El crecimiento en vida es Cristo como vida que se añade a nuestro ser. No sólo los cristianos, sino también los incrédulos, pueden experimentar una mejora a medida que su vida natural madura. Por ejemplo, a medida que un joven crece de adolescente a un hombre adulto de unos treinta años, mejorará. Sin embargo, esa mejora no corresponde al crecimiento en vida. Muchos cristianos han recibido ayuda para mejorar su conducta escuchando sermones. Aunque los sermones pueden ayudar a la gente a ser mejor, no les ayuda a crecer en vida. Según la Biblia, crecer equivale a que más de Cristo se forje en nuestro ser. El crecimiento en vida es simplemente el aumento de Cristo en nuestro ser.

A fin de que la iglesia sea edificada, se necesita urgentemente el crecimiento en vida. Sin este crecimiento, no podremos experimentar ninguna edificación. El crecimiento en vida es la verdadera edificación. Esta edificación no tiene que ver con tener a alguien sobre usted, debajo de usted o a su lado. Considere el ejemplo de Aquila y Priscila, quienes eran uno con los demás santos adondequiera que iban. Aquila y Priscila podían ser uno con otros creyentes porque habían crecido en vida considerablemente.

(Mensajes de vida, tomo 1 (#1-41), capítulo 2, por Witness Lee)