UNOS CUANTOS PUNTOS IMPORTANTES
POR LOS QUE TENEMOS QUE ORAR
EN CUANTO A TENER LAS REUNIONES
DE COMUNIÓN ESPECIAL Y LA OBRA
Debemos orar delante del Señor por estas reuniones de comunión especial que estamos teniendo y por la obra. En nuestra oración debemos prestar especial atención a varios asuntos. Primero, debemos orar para que el Señor dirija estas reuniones. Con relación a estas reuniones debemos someternos incondicionalmente al Señor, abrirnos a Él y permitirle que actúe libremente y nos dirija. También debemos pedirle que nos haga capaces de corresponder a Su dirección y guía.
En segundo lugar, debemos orar por todos los hermanos y hermanas. Debemos pedirle al Señor que prepare sus corazones y obre en su entorno para que estén prestos a recibir la gracia del Señor y lo que Él les hable, y al mismo tiempo estar dispuestos para contestar a Su llamado y satisfacer Su necesidad.
Tercero, debemos orar delante del Señor por nuestras circunstancias, por nuestras familias e incluso por el clima, pidiéndole que haga que todas estas cosas cooperen para nuestro bien y no se conviertan en algo que nos distraiga en las reuniones.
Cuarto, debemos pedirle al Señor de todo corazón que haga que más santos se levanten, y gane a algunos para que se consagren a Él. Debemos pedirle al Señor que gane a algunos para que participen en la obra; a otros para que ganen dinero en los negocios para el reino; a otros que sean competentes para administrar, dirigir y pastorear la iglesia; y a otros que puedan verdaderamente coordinar y servir en la iglesia. Todo esto requiere nuestra oración. También necesitamos ser guiados a la oración, bien sea en reuniones o en privado, para orar por alguna persona en particular o varios santos de forma individual.
Quinto, esperamos que en estas reuniones el Señor nos guíe en cuanto a la manera de propagar Su obra. Si Él nos escoge y se siente complacido con nosotros, debemos pedirle que ponga en nosotros Su carga y nos dirija en cuanto a la propagación de la obra, no sólo en las Filipinas, sino también en el Sudeste Asiático. Esperamos que el Señor nos guíe en este respecto; por tanto, debemos orar específicamente por esto.
Estos puntos son extremadamente cruciales. Espero que todos podamos preparar y abrir nuestros espíritus para recibir la carga de oración. Al orar juntos, nuestras palabras deben ser claras y nuestras voces deben hacerse oír. Además de esto, debemos procurar hacer oraciones breves.
(Puente y canal de Dios, El, capítulo 5, por Witness Lee)