Estudio-vida de Lucas, por Witness Lee

PRESENTADO POR JUAN EL BAUTISTA

Predica el bautismo del arrepentimiento

En 3:3-14 vemos que Juan el Bautista vino predicando el bautismo del arrepentimiento. El versículo 3 dice que “él fue por toda la región contigua al Jordán, proclamando el bautismo del arrepentimiento para perdón de pecados”. El arrepentimiento es un cambio en la manera de pensar, es volver la mente al Salvador-Hombre. El bautismo es la sepultura de las personas arrepentidas; son terminadas para que el Salvador-Hombre las haga germinar por medio de la regeneración (Jn. 3:3, 5-6).

Según 3:3, el bautismo del arrepentimiento tenía como fin el de perdón de pecados. La palabra griega traducida para también significa hacia. El objeto y resultado del arrepentimiento con el bautismo es el perdón de pecados, lo cual quita el obstáculo producido por la caída del hombre y reconcilia a éste con Dios.

Lucas 3:4-6 dice: “Como está escrito en el libro de las palabras del profeta Isaías, que dice: ‘Voz de uno que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor, enderezad Sus sendas. Todo valle será rellenado, y todo monte y collado nivelado; lo torcido será enderezado, y los caminos ásperos allanados; y verá toda carne la salvación de Dios’ ”. Preparar el camino del Señor y enderezar Sus sendas en 3:4 significa que la gente cambie su manera de pensar, que vuelvan la mente hacia el Salvador-Hombre. También significa hacer recto el corazón de ellos, al enderezar cada parte de su corazón por medio del arrepentimiento, para que el Salvador-Hombre pueda entrar en ellos a fin de ser su vida y poseerlos.

En 3:5 valle, monte, lo torcido y los caminos ásperos son figuras retóricas que describen la condición de los corazones de los hombres para con Dios y para con los demás, y también las relaciones entre los hombres (1:16-17). Tanto la condición de los corazones de los hombres como sus relaciones con otros deben ser rectificados a fin de que el camino esté preparado para la venida del Salvador.

El versículo 6 dice que toda carne verá la salvación de Dios. Aquí la palabra carne se refiere a los hombres caídos, y la palabra salvación denota el Salvador como la salvación de Dios.

Lo que Juan dice a las multitudes

En 3:7-9 Juan dijo a las multitudes que vinieron a ser bautizados por él: “¡Cría de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera? Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento, y no comencéis a decir dentro de vosotros mismos: Tenemos a Abraham por padre; porque os digo que Dios puede, de estas piedras, levantar hijos a Abraham. Y ya también el hacha está puesta a la raíz de los árboles; por tanto, todo árbol que no da buen fruto se corta y se echa en el fuego”. La frase cría de víboras mencionada en el versículo 7 equivale a hijos del diablo en 1 Juan 3:10.

En el versículo 8 Juan el Bautista dijo a la gente que Dios podía, de las piedras, levantar hijos a Abraham. Debido a la impenitencia de los judíos, tanto esto como lo dicho en el versículo 9 se ha cumplido. Dios los excluyó y levantó a los creyentes gentiles, para que fueran hijos de Abraham en la fe (Ro. 11:15, 19-20, 22; Gá. 3:7, 28-29). Esto también indica que el reino de Dios no está constituido de los que son hijos de Abraham por nacimiento, sino de los que lo son por fe.

En el versículo 9 Juan dice que todo árbol que no da buen fruto será cortado y echado al fuego. Este es el fuego del lago de fuego (Ap. 20:15), donde los incrédulos sufrirán la perdición eterna.

En 3:10-14 tenemos un relato de lo que Juan dijo a las multitudes, a los recaudadores de impuestos y a algunos que estaban sirviendo en la milicia. A los que le preguntaron qué debían hacer, Juan dijo: “El que tiene dos túnicas, dé al que no tiene; y el que tiene alimentos, haga lo mismo” (v. 11). A los recaudadores de impuestos que vinieron a ser bautizados, Juan dijo: “No exijáis más de lo que os está ordenado” (v. 13). A los que estaban sirviendo en la milicia, les dijo: “No hagáis extorsión a nadie, ni toméis nada mediante falsa acusación; y contentaos con vuestro salario” (v. 14). Lo que Juan dice aquí se relaciona con la moralidad. Con esto vemos que Lucas resalta la moralidad en su evangelio porque su intención consiste en presentar al Salvador-Hombre, quien posee el más alto nivel de moralidad.

(Estudio-vida de Lucas, capítulo 7, por Witness Lee)