CRISTO ES LA PORCIÓN DE LOS SANTOS
Cristo es un misterio, y Él es la “porción de los santos” (1:12). La palabra porción es como una herencia familiar que está repartida entre varios hermanos. Cristo es nuestra porción; nuestra porción delante de Dios es Cristo mismo.
El versículo 13 dice que Cristo es el Hijo del amor de Dios. Esto quiere decir que Cristo es el tesoro del corazón de Dios y Su deleite. Cristo es el tesoro del corazón de Dios, el amado Hijo de Dios. Dios nos dio el tesoro de Su corazón como nuestra porción. Los incrédulos preguntan muchas veces qué es lo que ganarán si creen en Jesús. Ellos no entienden cuando les digo que al creer en Jesús le obtenemos como nuestra porción. No sólo los incrédulos no entienden esta aseveración; incluso muchos cristianos tampoco lo entienden. Nuestra porción es el tesoro del corazón de Dios y Su mayor deleite. A modo de ilustración, digamos que una anciana por toda su vida ha valorado como un tesoro un gran anillo de diamante. Aun cuando ella está dispuesta a rendir su vida, no está dispuesta a entregar su anillo, porque es el tesoro de su corazón. Antes que muera, ella dejará el tesoro de su corazón, su anillo, a la hija que más ama para que llegue a ser la porción de su hija. Del mismo modo, Dios nos dio lo que Él más ama para que Su tesoro fuera nuestra porción.
(Gran misterio: Cristo y la iglesia, El, capítulo 2, por Witness Lee)