Ejercicio del reino a fin de edificar la iglesia, El, por Witness Lee

LA RECOMPENSA POR PERDER O SALVAR EL ALMA

El Señor dijo que el que quisiera salvar su alma la perdería, y que el que la perdiera por causa de Él la hallaría. Nosotros recibiremos una recompensa tanto por perder el alma como por salvarla. El versículo 27 dice: “Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de Su Padre con Sus ángeles, y entonces recompensará a cada uno conforme a sus hechos”. Si negamos nuestro yo, tomamos la cruz y perdemos el alma, recibiremos una clase de recompensa; pero si salvamos el alma, recibiremos otra clase de recompensa. De una manera u otra, cuando el Señor venga, seremos recompensados.

Sin embargo, esta recompensa no se aplica estrictamente al futuro, pues el versículo 28 dice: “De cierto os digo: Hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte, hasta que hayan visto al Hijo del Hombre viniendo en Su reino”. El Señor vendrá de dos maneras: cuando Él venga en el futuro y cuando venga en Su transfiguración. La transfiguración del Señor en el monte fue una forma de la venida del reino. En ambos tipos de venida hay una recompensa conforme a nuestros hechos, esto es, si nos negamos a nosotros mismos, tomamos la cruz y perdemos el alma.

(Ejercicio del reino a fin de edificar la iglesia, El, capítulo 5, por Witness Lee)