SUFRIR POR CAUSA DE LA JUSTICIA
Sufrir por causa de la justicia sin duda significa perder el disfrute del alma. Siempre que estamos dispuestos a perder el disfrute del alma hoy por causa de la justicia, estamos en el reino, y el reino es nuestro. En esto también consiste el ejercicio del reino. Esto no tiene que ver con recibir una recompensa ni con experimentar un gozo, ni tampoco es algo de lo cual podemos jactarnos. Hoy en día el mundo entero rechaza a Cristo y al reino y también rechaza a los seguidores de Cristo. Por consiguiente, hoy sufrimos por seguir a Cristo y perdemos el disfrute de nuestras almas. Es debido al reino que estamos dispuestos a perder nuestro disfrute; es debido al reino que estamos dispuestos a negar el yo y a ser pobres en espíritu; y es debido al reino que estamos dispuestos a ser un don nadie, a reconocer que no sabemos nada y a ser un vaso vacío que puede ser lleno de Cristo para la edificación de la iglesia.
Mateo 5:10 nos habla de padecer por causa de la justicia porque, según la Biblia, el reino en todo aspecto tiene que ver con la justicia. Por lo tanto, padecer por causa de la justicia equivale a padecer por causa del reino. Si padecemos por causa del reino, si estamos dispuestos a perder nuestro disfrute anímico hoy, estaremos en el reino. No habrá necesidad de que entremos en el reino, porque ya estaremos en él. Pero ¿en qué aspecto del reino nos encontramos hoy? No estamos en el aspecto que reina, sino en el aspecto del ejercicio. Repito una vez más que el aspecto reinante del reino está por venir, pero el aspecto del ejercicio está presente hoy.
(Ejercicio del reino a fin de edificar la iglesia, El, capítulo 7, por Witness Lee)