LOS MINISTERIOS EN LAS DENOMINACIONES
En cuanto a la cuestión del ministerio, debemos entender claramente la verdad revelada en la Biblia como también la situación que impera en el cristianismo actual. Originalmente, en la época de los apóstoles, había un Cuerpo con un solo ministerio. Pero debido a la degradación de la iglesia, surgieron las divisiones y denominaciones. Ahora cada división tiene lo que ellos mismos llaman su propio ministerio. Los bautistas, los presbiterianos, los luteranos, los episcopales y los pentecostales, todos ellos, tienen sus propios ministerios. Los ministros, los pastores y los predicadores de las diferentes denominaciones laboran para edificar las denominaciones, no para edificar el Cuerpo. Debido a que cada uno edifica su propia denominación, ellos no pueden laborar con otros.
No debemos tener nada que ver con las denominaciones. En el recobro del Señor estamos a favor del recobro de Cristo como nuestra vida y nuestro todo con miras a la edificación de la iglesia. A fin de que se cumpla el propósito de Dios en Su recobro, debemos regresar al principio, debemos regresar a la Palabra pura. En el Nuevo Testamento sólo existe un ministerio que es único en su género. Desde los tiempos de los apóstoles hasta nuestros días, este ministerio aún no ha terminado. Yo creo que nosotros somos la continuación de este ministerio. Me siento contento de poder decir que estoy en este ministerio y que soy parte del mismo. Estamos en este único ministerio que es conforme a la economía neotestamentaria.
(Mensajes de la verdad, capítulo 4, por Witness Lee)