SER UNO EN LA GLORIA,
LA EXPRESIÓN DEL PADRE
Juan 17:22 dice: “La gloria que me diste, Yo les he dado, para que sean uno, así como Nosotros somos uno”. Tal como lo indicamos, la gloria es la expresión de Dios. Jesús pareciera decir: “Padre, Tú me has dado la vida, el derecho y la posición para ser Tu Hijo a fin de expresarte. Ahora Yo les he dado esta gloria a todos Mis creyentes. Ellos también tienen Tu vida, naturaleza, derecho y posición divinas para expresarte a Ti”. Esto significa que somos uno en la expresión divina. No estamos aquí para expresar cierta doctrina, sino para glorificar, para expresar a Dios el Padre. No estamos a favor del bautismo, el presbiterio ni siquiera por la justificación por fe. Sí, somos justificados por fe, practicamos el bautismo y el presbiterio, pero no estamos aquí a favor de ninguna de estas cosas. Nuestra posición es solamente por Dios. Nuestra gloria no es la justificación por fe, el bautismo por inmersión ni el presbiterio; nuestra gloria es Dios mismo. Nosotros tenemos la gloria del Hijo, y es en esta gloria, la gloriosa expresión de Dios el Padre, que somos uno. Dios es único, Su expresión es única y Su gloria es única. Por tanto, somos únicos en Su expresión. Por el contrario, si estamos a favor del presbiterio, los dones carismáticos, el bautismo o la justificación por fe, estaremos divididos. Todos debemos estar a favor de la única expresión, que es la gloria de Dios el Padre. De esta manera somos uno.
(Testimonio de Jesús, El, capítulo 2, por Witness Lee)