Cristo que mora en nosotros seqún se ve en el canon el Nuevo Testamento, El, por Witness Lee

EL VERDADERO REPOSO

Después que Él fue crucificado, el Señor fue puesto en el sepulcro. Ese día fue un verdadero día de Sábado. Él descansó porque había terminado toda Su obra. Los judíos habían discutido con Él con respecto al mandamiento de guardar el Sábado. Lo criticaron porque Él no había guardado el Sábado conforme a sus ordenanzas. Pero Él les dijo que trabajaba porque el Padre hasta ese momento trabajaba (Jn. 5:16-17). En aquel tiempo la obra aún no había sido acabada. Sin embargo, cuando estuvo en la cruz, Él dijo: “Consumado es”. Eso significa que Él terminó la obra que el Padre le había mandado hacer. Así que, cuando ellos lo pusieron en la tumba, Él realmente pudo descansar. La obra fue acabada. Aquello fue guardar el Sábado de una manera verdadera. Por supuesto, aquello también fue una especie de muerte. Pero la muerte no pudo retener la vida de resurrección (Hch. 2:24). La vida se levantó de los muertos.

(Cristo que mora en nosotros seqún se ve en el canon el Nuevo Testamento, El, capítulo 2, por Witness Lee)