Ejercicio y la práctica de la manera ordenada por Dios, El, por Witness Lee

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EVITAR LOS VIENTOS DE ENSEÑANZAS DIFERENTES

Si en realidad estamos en pro del recobro del Señor, debemos pararnos firmes en contra de toda enseñanza contraria a la verdad. La unidad de la salvación de Dios es la familia, y esto es según la verdad; por ende, debemos defender esta verdad. Tenemos que comprender que somos enviados por el Señor para ponernos en contacto con las familias, es decir, con la unidad completa de la salvación de Dios. Si prestamos atención solamente a individuos más bien que a familias, tal vez nuestro Dios se ofenda. Nuestro objetivo al comunicarnos con la gente debe incluir a toda la familia.

Muchos de nosotros todavía estamos bajo la influencia de enseñanzas erróneas. El apóstol Pablo describe esas enseñanzas como “todo viento de enseñanza” (Ef. 4:14, gr.). Si un viento de enseñanza está errado en una manera obvia, ningún cristiano le hará caso. Si, por ejemplo, alguien nos dice que adoremos ídolos, no le prestaremos atención. En cambio, alguien tal vez nos diga: “Está bien, por supuesto, no debemos adorar ídolos, pero Dios es muy abstracto. Necesitamos un cuadro de Jesús. Un cuadro de Jesús no es un ídolo”. Es extraño que todos los “cuadros de Jesús” muestren a una persona tan apuesta. Según la historia, dichos cuadros tienen su origen en la Edad Media. Tales obras de arte son completamente opuestas a la descripción que hace Isaías del Señor Jesús. Isaías 53:2 dice: “No hay parecer en él, ni hermosura; le veremos, más sin atractivo para que le deseemos”. El no era apuesto conforme a la manera natural de pensar. Esto prueba que los cuadros en las paredes de algunos hogares cristianos, no son cuadros de Jesús, con todo, hay algunos que incluso adoran tales imágenes. Tales retratos son engañosos, pervertidos y hasta demoníacos.

En 1936 visité una provincia en la parte central de China. Un día una persona muy devota vino a mí y me dijo que un familiar suyo estaba poseído por un demonio. Me preguntó qué debían hacer. Primero le pregunté si había ídolos en su casa. Después de pensarlo me dijo que no había ninguno. Le pedí que se cerciorara si había algún cuadro en la casa que pudiera ser objeto de adoración. Admitió que había un “cuadro de Jesús”. Cuando le sugerí que destruyera esa imagen, él estaba indeciso porque era cristiano y no quería ser culpable de destruir un “cuadro de Jesús”. Le expliqué que aquello no era un retrato del verdadero Jesús, sino que algún artista había hecho un cuadro bonito y había dicho que ése era el Señor Jesús. En muchos casos la posesión demoníaca es resultado de la adoración de este tipo de artículos de idolatría. Una vez que este hermano vio la verdadera situación, quemó la imagen de idolatría, y el demonio se fue.

Si alguien viniera a usted y le dijera directamente que adore ídolos, usted se rehusaría a hacerlo. Es por esto que ellos vienen en una manera perversa y engañosa. En Manila hay una plaza con una inmensa catedral católica, llamada la plaza del “Jesús negro”. Construyeron una estatua, una figura hecha en piedra, y la designaron “el Jesús negro”. Ellos dicen que Jesús no es sólo para los blancos sino también para los negros. Uno de los pies de esta estatua está casi completamente desgastado debido a que mucha gente lo ha estado tocando por siglos. Tocar los pies de este “Jesús negro” lo consideran ellos un honor. Esta práctica es el producto de un viento de enseñanza que está fuera de la línea central de la economía de Dios. Efesios 4:14 dice que los vientos de enseñanza están relacionados con las artimañas del hombre y también con la astucia de los hombres. La astucia de los hombres está conectada con un sistema de error. ¿De quién es este sistema? Este sistema es de Satanás. La intención de Satanás es dañar, destruir, la edificación del Cuerpo de Cristo. Esa es su única meta.

Conforme a las Escrituras la principal manera de predicar el evangelio es visitar a la gente. Cualquier otra enseñanza que sea diferente a ésta o que se le oponga es un viento de enseñanza. Invitar gente al lugar de reunión no es la principal manera de predicar el evangelio. La manera que Dios ha ordenado para que nosotros vayamos a predicar el evangelio está primordialmente concentrada en que vayamos a visitar a la gente donde esté.

El Señor Jesús fue el primero en ir a visitar a la gente. Hasta fue a la menospreciada ciudad de Jericó. En la Biblia, Jerusalén es una ciudad bendecida, mientras que Jericó es una ciudad maldecida. Jerusalén está en un monte, el monte de Sion. Jericó está abajo en un valle caliente y polvoriento. En Jericó el Señor Jesús fue a la casa de Zaqueo, un jefe de los cobradores de impuestos. En Lucas 19:5 le dijo a Zaqueo: “Hoy es necesario que pose yo en tu casa”. Unos versículos más adelante El le declaró a Zaqueo: “Hoy ha venido la salvación a esta casa” (Lc. 19:9). El Señor se refirió dos veces a la casa en el caso de Zaqueo porque tuvo en consideración la familia como unidad. Si alguien se opone a la verdad de esta unidad de salvación, los santos serán distraídos y desanimados. El resultado de semejante viento de enseñanza es que dicha enseñanza destruye la edificación del Cuerpo de Cristo. Toda oposición a la predicación del evangelio visitando a la gente y tocando puertas es del diablo. Predicar el evangelio yendo a la gente y visitando los hogares para ponernos en contacto con las familias es conforme a las Escrituras.

(Ejercicio y la práctica de la manera ordenada por Dios, El, capítulo 8, por Witness Lee)