Cómo administrar la iglesia, por Witness Lee

Más extractos de este título...

EL NUEVO HOMBRE ES RENOVADO CONFORME A LA IMAGEN DEL QUE LO CREÓ

Pese a que nos hemos vestido de Cristo y Cristo está en nosotros, el nuevo hombre aún no se manifiesta a través de nosotros. Según Colosenses 3:10, el nuevo hombre “se va renovando hasta el conocimiento pleno”. Cuando somos salvos, Cristo entra en nosotros y nosotros nos vestimos de Él (Gá. 3:27). Sin embargo, aún no tenemos el suficiente conocimiento de Cristo. Por ello, a partir del día de nuestra salvación somos renovados hasta el conocimiento pleno. Cuanto más creamos, más conocimiento recibiremos; cuanto más creamos, más completo llegará a ser nuestro conocimiento; y cuanto más creamos, más rico será nuestro conocimiento. Esta renovación gradual es conforme a la imagen del Señor; esto significa que Cristo nos ha puesto en Él y nos ha creado como un solo y nuevo hombre. Desde el día en que fuimos salvos, hemos venido vistiéndonos del nuevo hombre, y este nuevo hombre es exactamente igual al Señor. Sin embargo, debido a que tenemos un conocimiento inadecuado de este nuevo hombre, nuestro vivir aún no exhibe plenamente la imagen del Señor.

Desde el día de nuestra salvación, el nuevo hombre está siendo renovado hasta el conocimiento pleno, y esta renovación es conforme a la imagen del que lo creó. Nosotros nos vestimos del nuevo hombre una vez y para siempre, pero nuestro conocimiento del nuevo hombre está siendo renovado gradualmente, y este proceso gradual de renovación es conforme a la imagen del Señor. En otras palabras, a medida que conozcamos más al Señor, más será renovado el nuevo hombre y más se manifestará la imagen del Señor.

Colosenses 3:11 dice: “Donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro, escita, esclavo ni libre; sino que Cristo es el todo, y en todos”. La palabra donde se refiere al nuevo hombre. En el nuevo hombre no puede haber griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro, escita, esclavo ni libre. Todas estas distinciones corresponden al viejo hombre; y todas ellas han desaparecido por completo en el nuevo hombre. La iglesia no pertenece a la vieja creación, sino que es una nueva creación, la cual es el nuevo hombre que Cristo creó en Sí mismo.

(Cómo administrar la iglesia, capítulo 8, por Witness Lee)