LAS ETAPAS DE LA ECONOMIA DE DIOS
Hemos visto el propósito de Dios y qué es lo que Dios dispensa; ahora debemos comprender cómo Dios es dispensado por medio de Su economía. En otras palabras, lo que Dios dispensa en el hombre es Espíritu, pero ahora necesitamos ver los medios por los cuales El hace esto. Es mediante Su Trinidad. El Dios Triuno —el Padre, el Hijo y el Espíritu— es la verdadera economía de la Deidad. Durante los siglos pasados el cristianismo ha tenido muchas enseñanzas acerca de la Trinidad, pero la Trinidad no puede ser adecuadamente entendida a menos que se le relacione con la economía divina. ¿Por qué se requieren las tres Personas de la Deidad para el desarrollo de Su economía? Sabemos que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo no son tres Dioses diferentes, sino un Dios que se expresa en tres Personas. Sin embargo, ¿cuál es el propósito de que haya tres Personas en la Deidad? ¿Por qué existen Dios el Padre, Dios el Hijo y también Dios el Espíritu Santo? Se debe a que sólo por medio de la Trinidad pueden ser provistos los medios esenciales por los cuales Su Espíritu es dispensado en nosotros.
Segunda Corintios 13:14 muestra las etapas de la economía de Dios mediante la Trinidad. “La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros”. Aquí tenemos la gracia del Hijo, el amor del Padre y la comunión del Espíritu Santo. ¿Qué significa esto? ¿Son éstos tres Dioses diferentes? ¿Acaso el amor, la gracia y la comunión son tres cosas diferentes? No. El amor, la gracia y la comunión son un solo elemento en tres etapas: el amor es la fuente, la gracia es la expresión del amor y la comunión es la transmisión en gracia de este amor. Del mismo modo, Dios, Cristo y el Espíritu Santo son un solo Dios expresado en tres Personas: Dios es la fuente, Cristo es la expresión de Dios, y el Espíritu Santo es la transmisión que introduce en el hombre a Dios quien está en Cristo. Por lo tanto, las tres Personas de la Trinidad vienen a ser las tres etapas sucesivas del proceso de la economía de Dios. Sin estas tres etapas, la esencia de Dios no podría jamás ser dispensada en el hombre. La economía de Dios se desarrolla desde el Padre, en el Hijo y mediante el Espíritu.
(EconomÃa de Dios, La, capítulo 1, por Witness Lee)