LA FUNCION DE LAS REUNIONES DE GRUPO
Es preferible empezar una reunión de grupo con un pequeño número de personas. Si empezamos con muchas personas resultará difícil conocerse a fondo el uno al otro, de manera personal y cariñosa. Sin embargo, con sólo dos a cinco miembros será difícil practicar la función adecuada del grupo, el cual es visitar a los pecadores y ganarlos para el Señor. Es preferible ser siete u ocho en un grupo. Después de cierto tiempo todos se conocerán perfectamente. Antes de que esto ocurra no deberíamos salir a predicar. Primero debemos conformar un grupo activo al conocernos unos a otros, y al ser edificados y entrenados. Entonces podemos empezar a funcionar visitando a la gente y predicándole el evangelio. De esta manera se puede ganar a los nuevos progresivamente, uno por uno. Si el grupo gana personas poco a poco, no resultará difícil hacerles el seguimiento a los nuevos y cuidarlos.
Debemos ser diligentes para llevar a cabo esto. Esto va a requerir mucho trabajo y también el trabajar juntos. Un grupo de siete personas puede ganar uno más y llegar a ser ocho. Entonces estos ocho pueden trabajar juntos y traer otro nuevo. A los ocho les resultará fácil cuidar a un nuevo y así llegar a ser nueve. Gradualmente, después de seis meses de trabajo, el grupo puede llegar a tener quince o dieciséis personas. Para aquel entonces, cada uno conocerá al otro y estará entrenado. Entonces el grupo se puede dividir en dos. Después de constituir dos grupos, cada cual podrá trabajar porque ya se habrán conocido y habrán recibido práctica y entrenamiento. Cada grupo empezará con personas entrenadas, y no con nuevos principiantes. Estos serán la fundación para la siguiente generación, y esa generación estará lista para seguir adelante. Debemos pasar los primeros cinco o seis meses en los grupos para ser edificados. Después de eso podemos duplicar nuestro número en los seis meses siguientes. Esto duplicará el número en los grupos. Cuando se duplique este número dos veces más, toda la iglesia se habrá multiplicado por dos cuando menos. Tal vez nuestro progreso sea menor, pero confiamos en tener éxito en este camino si todos laboran.
(Comunión en cuanto a la urgente necesidad de los grupos vitales, capítulo 5, por Witness Lee)