Levantarnos para predicar el evangelio, por Witness Lee

Más extractos de este título...

ACEPTAR POR COMPLETO EL CAMBIO DE SISTEMA Y ESFORZARNOS POR PRACTICAR LA NUEVA MANERA ORDENADA POR DIOS

Por lo tanto, estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo por cambiar el sistema. Hay tres partes que debemos cambiar. El primer cambio tiene que ver con “engendrar”, con dar a luz nuevos creyentes, dejando la manera tradicional de esperar a que la gente venga para escuchar el evangelio y adoptando la manera de visitar los hogares de las personas al llamar a sus puertas con miras a que sean salvos. El segundo cambio tiene que ver con “nutrir”, es decir, en vez de ir a los hogares de otros para meramente hablar con levedad, utilizamos nuestro espíritu para hablar la palabra, cantar y orar a fin de nutrir y cuidar con ternura a los nuevos creyentes. El tercer cambio tiene que ver con “enseñar”, dejando la vieja manera de predicar en las reuniones grandes conforme a la inspiración y adoptando el uso de materiales apropiados de instrucción y enseñando de forma secuencial. Esperamos que los hermanos y las hermanas entiendan estos tres puntos y los acepten por completo. No sólo deben hacer esto los colaboradores y ancianos, sino también todos los santos.

Debido a la nueva dirección que el Señor nos ha dado, debemos tener una mayor cantidad de santos que lleven la carga a fin de satisfacer la necesidad. Todos los hermanos y las hermanas deben participar y estar dispuestos. Sin embargo, casi todos están cargados, algunos por sus negocios y otros por la necesidad de trabajar y también de atender a los asuntos del hogar. Su tiempo está consumido, y no es mucho el tiempo que ellos pueden liberar. Sin embargo, siempre y cuando usted tenga el corazón, no importa cuán ocupado usted esté, creo que puede apartar de dos a tres horas a la semana para llamar a las puertas, nutrir a los nuevos y enseñarles. Esto también es aceptable. En cierta ocasión, mientras estaba en un monte, conocí un miembro de los Testigos de Jehová, quien está en el negocio de bienes raíces. Normalmente él está extremadamente ocupado, pero él tomó la decisión de pasar dos días a la semana llamando a las puertas. No esperamos que cada santo sea como él, pero esperamos que quienes tengan el corazón vayan a visitar no solamente a aquellos con quienes están familiarizados, sino también a aquellos a quienes nunca han contactado antes.

Un hermano de Cleveland dijo que en tan solo unos pocos días ellos llamaron a más de mil puertas. Puesto que llamar a las puertas requiere una gran cantidad de personal, muchos servidores de tiempo completo necesitan ser levantados. Creo que ésta es la dirección del Señor y que es absolutamente la mejor práctica después de años de consideración. En cada iglesia local, debería haber un servidor de tiempo completo por cada veinte santos. Hay sobre quinientos santos que sirven a tiempo completo ahora en Taiwán, y el número de solicitantes sobrepasa los mil cien. Según la cantidad que se reúne en los Estados Unidos, allí también debería haber quinientos servidores de tiempo completo. En la actualidad ya hay doscientos, así que todavía faltan unos trescientos. Por lo tanto, la necesidad es muy grande.

(Levantarnos para predicar el evangelio, capítulo 7, por Witness Lee)