HACER MEMORIA DEL SEÑOR
AL COMERLE Y BEBERLE
Después del capítulo 10 tenemos la cena del Señor en el capítulo 11. Aunque estuve en el cristianismo por muchos años, y atendí a la así llamada comunión muchas veces, nunca oí decir a nadie que recordar al Señor equivale a comerle y beberle. El Señor Jesús nos dijo que comiésemos y bebiésemos en memoria de Él (11:24-25; Mt. 26:26-27). Hacer memoria del Señor auténticamente es comerle y beberle. Hacer memoria de un ser amado implica ejercitar nuestra mente para recordar las bondades y virtudes que tenía esa persona. Pero hacer memoria del Señor Jesús no es así. Recordar al Señor Jesús es comerle, recibirle en nuestro ser. “Tomad, comed; esto es Mi cuerpo” (v. 26); “Haced esto en memoria de Mí” (1 Co. 11:24). “Bebed de ella todos; porque esto es Mi sangre” (Mt. 26:27-28); “Haced esto todas las veces que la bebáis, en memoria de Mí” (1 Co. 11:25).
La mesa del Señor es una exhibición de nuestra vida diaria. Día tras día vivimos comiendo a Jesús. Él dijo: “El que me come, él también vivirá por causa de Mí” (Jn. 6:57). Día tras día comemos a Jesús y vivimos por causa de Jesús. Entonces, en el primer día de la semana nos congregamos para hacer una declaración a todo el universo. Podríamos decir: “Satanás, ángeles, demonios, vengan todos y vean. Nuestra manera de vivir es comer a Jesús cada día. Ahora venimos a la mesa del Señor para hacer una exhibición. Ésta es nuestra vida, y éste es nuestro diario andar”. No obstante, si no llevamos esta vida y andar diarios, la reunión de la mesa del Señor es sólo una actuación. En este caso la iglesia viene a ser un teatro en donde actúan actores y actrices. Esto no es auténtico. No es una exhibición, una declaración, sino una actuación. La reunión de la mesa del Señor no debe ser una actuación. Debe ser una exhibición, una declaración, que nosotros hacemos a todos los seres en el universo. Espero que siempre que celebremos la mesa del Señor, hagamos tal declaración: “¡Oh, todas las criaturas, vengan y vean! ¡Satanás, ven y ve! ¡Todos los ángeles, todos los demonios y todas las criaturas, vengan y vean! Nuestra manera de vivir es comer y beber a Jesús”. Ahora hacemos exhibición de este vivir a todo el universo. Esto es hacer memoria del Señor Jesús.
(Disfrutar las riquezas de Cristo para la edificación de la iglesia como Cuerpo de Cristo, capítulo 8, por Witness Lee)