NO PREOCUPARSE POR EL OPROBIO
DE PARTE DE LOS OPONENTES
Por favor, lean Esdras, Nehemías, Hageo y Zacarías. Algunas personas menospreciaron y miraron con oprobio la obra de reedificar a Jerusalén, diciendo que quienes habían regresado estaban edificando algo insignificante (Neh. 4:1-4). ¿Es la edificación una obra insignificante? Esperen y vean. Al Señor no le interesan los gigantes espirituales; los gigantes espirituales significan muy poco para Él. El Señor segará a todos Sus buscadores que andan errantes. En los Estados Unidos la cosecha está madura, y el tiempo es el correcto. Éste es el tiempo para la cosecha del Señor. El Señor juntará como un rebaño a los que andan errantes. Él satisfará a cada santo hambriento que le busca, por medio de las iglesias locales.
Aunque yo trabajo mucho todo el tiempo, cada noche duermo bien. Estoy tan contento de que el recobro del Señor no es ninguna obra humana. Esto es lo que el Señor está haciendo hoy en la tierra, y es algo absolutamente nuevo. El cuidado que el Señor brinda a Su recobro puede verse en este ejemplo de cómo Él cuida de la nación de Israel. Recientemente, después que los líderes árabes armaran juntos una conspiración en cierta conferencia, el Señor miró a Nasser, el líder egipcio, y parecía decirle: “Estás listo para partir”, y Nasser murió. Incluso algunos periódicos seculares dijeron que la muerte de Nasser era un milagro. Desde ese tiempo, no ha habido grandes líderes entre los países árabes. Egipto obtuvo de Rusia una capacidad militar y económica; pero recientemente, Egipto hizo cesar a todos sus altos oficiales que estaban a favor del comunismo. Rusia estaba en confusión al respecto y no sabía qué hacer. Esto también era la obra del Señor. La unidad de los países árabes ha sido quebrantada, y el pequeño Israel está contento. Alabado sea el Señor, los países árabes no pueden hacer nada contra la pequeña nación de Israel. De igual manera, el recobro de la vida de iglesia es algo que el Señor mismo está haciendo, y es algo maravilloso a nuestros ojos.
(Disfrutar las riquezas de Cristo para la edificación de la iglesia como Cuerpo de Cristo, capítulo 15, por Witness Lee)