Lo que el reino es para los creyentes, por Witness Lee

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EL REINO EN EL QUE DIOS EJERCE SU REINADO DEPENDE DE LA VIDA DIVINA

En la Palabra de Dios se presenta muy claramente el pensamiento acerca del reino. Si leemos todas las Escrituras cuidadosamente, veremos que de principio a fin Dios desea obtener una esfera para Su reinado. ¿Cómo obtiene Dios esta esfera en la cual reina? O, podemos preguntar, ¿cómo introduce Dios este reino? Él lo hace por medio de Su vida. Es por ello que en la Biblia la vida siempre está vinculada con el reino. Al comienzo de Génesis vemos que Dios desea que el hombre ejerza dominio por Él sobre la tierra (1:26). El dominio está relacionado con el reino. El deseo de Dios de que el hombre ejerza dominio por Él sobre la tierra muestra que Dios se ha propuesto establecer Su reino en la tierra por medio del hombre. Después de Génesis 1, donde se nos habla del deseo que Dios tiene de que el hombre ejerza dominio por Él en la tierra, Génesis 2 nos presenta el árbol de la vida (v. 9). Esto indica que a fin de que el hombre ejerza dominio por Dios sobre la tierra y traiga el reino, necesita recibir la vida eterna de Dios en su interior. Si el hombre no posee la vida eterna de Dios, no podrá jamás traer la autoridad de Dios a la tierra. Por consiguiente, la Biblia desde el comienzo revela que Dios vincula la vida con el dominio. De ahí que la obra de Satanás también está relacionada con este asunto. Satanás apartó al hombre del árbol de la vida porque sabía que si el hombre no recibía la vida de Dios, no podría traer la autoridad de Dios a la tierra. El reino como la esfera en la cual Dios reina depende enteramente de la vida de Dios.

Por esta razón, el Señor Jesús le dijo a Nicodemo: “El que no nace de nuevo, no puede ver el reino de Dios” (Jn. 3:3). Asimismo dijo: “El que no nace de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios” (v. 5). El reino de Dios tiene que ver con el reinado de Dios; la regeneración del hombre consiste en que el hombre reciba la vida de Dios. A fin de que el hombre toque el reinado de Dios y traiga la autoridad de Dios a la tierra, él tiene que recibir en su interior la vida de Dios. Si el hombre no posee la vida de Dios, de ningún modo podrá traer el reinado de Dios.

(Lo que el reino es para los creyentes, capítulo 4, por Witness Lee)