HAY UNA CARENCIA
Sin embargo, después de todas estas descripciones tan positivas, ella dice: “Mientras despunta el día y huyen las sombras, me iré al monte de la mirra, a la colina del olíbano [heb.]” (4:6). Independientemente de cuánto otros la elogien, incluyendo al Señor, ella aún siente que el día no ha amanecido y que aún persisten algunas sombras. Así que, incluso en esta etapa ella todavía anhela tener una experiencia más profunda y más rica de la muerte del Señor. Debido a esto, ella se va al monte de la mirra y a la colina del olíbano. Esto significa que la intención de ella es quedarse allí hasta que el día amanezca y huyan todas las sombras.
¿Por qué, después de todos estos logros, persisten las sombras y el día aún no despunta? Porque independientemente de cuán elevados sean sus logros, el propósito final del Señor aún no se ha cumplido. En lo que a ella se refiere, ella está satisfecha y ha madurado. Pero en lo que al propósito del Señor se refiere, nada se ha cumplido. Ella ha alcanzado una etapa muy elevada, pero siente que todavía le falta algo. El día aún no despunta y persisten las sombras. Por lo tanto, ella decide ir al monte de la muerte del Señor y a la colina de Su resurrección.
(Vida y la edificación como se presentan en Cantar de los cantares, La, capítulo 9, por Witness Lee)