Evangelio de Dios, El, por Watchman Nee

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LA JUSTICIA DE LA SALVACION

Debemos saber que antes de la muerte del Señor Jesús, era injusto que Dios perdonara nuestros pecados, pero después de la muerte del Señor Jesús, sería igualmente injusto si no perdonara nuestros pecados. Sin la muerte del Señor Jesús, Dios sería injusto al perdonar; nunca podría hacerlo. Con la muerte del Señor Jesús, El sería igualmente injusto si no perdonara. Por favor recuerden, una redención sin sangre es injusta. Por otro lado, si uno tiene la sangre y la salvación le es negada, esto también es injusto.

Una vez fui con un hermano a Kiukiang. Mientras íbamos en el barco navegando y compartiendo la palabra con otros, le hablé a una persona acerca de nuestra fe. Al mismo tiempo este hermano le hablaba a otro, que era musulmán. Durante la conversación, el hermano le preguntó al hombre si tenía algún pecado. El hombre trató de decirle lo bueno que era el Islam y lo grande que era Mahoma. Pero el hermano le dijo: “Esa no fue mi pregunta. Mi pregunta es: ¿Tiene usted algún pecado?” El confesó que sí. Luego nuestro hermano le preguntó: “¿Qué va a hacer entonces? ¿Existe alguna manera para que usted sea perdonado?” El hombre respondió que si quería ser perdonado, tendría que sentir un remordimiento de corazón y hacer el bien; hacer esto, aquello y muchas otras cosas. Después de que el hombre enumeró todo lo que se debían hacer, este hermano le dijo: “Este es precisamente el punto de controversia. Usted ha dicho que cuando uno peca, el remordimiento puede traer perdón. Pero yo digo que cuando uno peca, debe ser castigado. Sin castigo, no puede haber perdón. ¿Cree usted que con sentir remordimiento será perdonado? Yo digo que el perdón sólo viene por el juicio. Si yo pequé en esta ciudad y escapé a un país lejano, puedo sentir remordimiento allí y hacer muchas caridades. Puedo ser un buen hombre allí. Pero nada de esto revocará mi pecado. Su Dios es un Dios que perdona sin juicio. Pero mi Dios es un Dios que perdona sólo después de castigar”. El musulmán después preguntó: “Entonces, ¿cómo puedo ser perdonado?” “De la siguiente manera”, dijo el hermano: “Usted debe creer en el Señor Jesús. Solamente así será perdonado. Sus pecados han sido perdonados en el Señor Jesús, y cuando cree en El, usted es perdonado”. Así es la justicia de Dios. En la actualidad los hombres argumentan si Dios es amor o no. Ellos no se dan cuenta que Dios no solamente es amor, sino también justicia. Dios no solamente quiere perdonar los pecados del hombre. El tiene que perdonarlos de una manera que no contradiga Su naturaleza y Su justicia.

(Evangelio de Dios, El, capítulo 5, por Watchman Nee)