Cristo crucificado, El, por Witness Lee

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DESPUÉS DE SU RESURRECCIÓN EL SEÑOR ENTRÓ EN SUS DISCÍPULOS PARA SER LA VIDA DE ELLOS

El día en que el Señor Jesús resucitó, los once discípulos estaban reunidos en una casa, y las puertas estaban cerradas. De repente, el Señor Jesús apareció. Después de Su resurrección, Él intencionalmente se apareció a los discípulos para mostrarles que ya no estaba limitado por el tiempo ni el espacio. Los discípulos estaban reunidos en una casa, y las puertas estaban cerradas, pero Él no se vio limitado por estas cosas. ¿Por qué? Debido a que Él ya había trascendido todas estas cosas. Por un lado, Él está por encima de todo; por otro, Él está en todos. Cada vez que alguien cree en Su nombre y lo invoca, el Señor entra en él para ser su vida.

En Hechos, cuando vemos a Pablo, a Pedro, a Juan y a Esteban, lo único que podemos hacer es adorar al Señor, porque Él como el único grano murió y para ese entonces había llevado mucho fruto. Él es Cristo, la vida eterna. Por medio de Su muerte y Su resurrección, todo el que en Él cree, recibe Su vida. Por lo tanto, todo el que cree en Él es Cristo. Pablo, Juan y Esteban eran Cristo porque Su vida estaba en ellos y porque Cristo mismo estaba en ellos.

(Cristo crucificado, El, capítulo 3, por Witness Lee)