Espíritu y el cuerpo, El, por Witness Lee

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EL CAMINO MÁS EXCELENTE

En 1 Corintios 12:31 Pablo también dice: “Mas yo os muestro un camino aún más excelente”. No sólo debemos anhelar los dones superiores, sino también ponerlos en práctica conforme al camino más excelente. Una cosa es tener los dones superiores, y otra es practicarlos según el camino más excelente. Uno puede tener los dones superiores y a la vez no disponer del camino más excelente para ponerlos en práctica. En este mensaje siento la carga de tener comunión con ustedes en cuanto al camino más excelente de practicar los dones.

Por supuesto, el camino más excelente se revela en 1 Corintios 13, que es la continuación directa del capítulo 12. En 1 Corintios 13:1 dice: “Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como bronce que resuena, o címbalo que retiñe”. El bronce que resuena y el címbalo que retiñe son sonidos de objetos inertes. Por lo tanto, ser como bronce que resuena o como címbalo que retiñe significa ejercer nuestra función sin ninguna vida. Debemos orar al Señor, diciendo: “Señor, muéstrame la diferencia entre la función y la vida. Muéstrame que es posible hacer sonidos, pero no tener vida”. Pablo continúa diciendo que es posible tener el don de profecía, entender todos los misterios y todo conocimiento, y tener fe para trasladar montes, y aun así no tener amor. Si tenemos todas estas cosas pero no tenemos amor, no tendremos nada que ver con la vida. Además, es posible que demos cosas materiales a los pobres, e incluso entreguemos nuestro cuerpo para ser quemado, y aun así no obtener ningún provecho debido a que no tenemos amor (v. 3). Esto nos muestra que es posible poseer muchos dones y funciones, y a la vez estar carentes de vida.

(Espíritu y el cuerpo, El, capítulo 17, por Witness Lee)